Más de 19 mil personas llenaron el American Airlines Center en espera de una noche de grandes peleas y eso fue lo que obtuvieron.
Amanda Nunes respaldó sus dichos, el cambio de campamento la hizo sentir más segura y volvió a ser dominante, en una revancha que ponía en riesgo todo su legado. Julianna Peña no dejó de intentarlo hasta el final, pero fue superada ampliamente y regresó el cinturón a la más grande de todos los tiempos.
Brandon Moreno también recuperó el título, aunque en este caso es interino, pero abrió la puerta a la unificación con Deiveson Figueiredo en el siguiente semestre. Una noche redonda para el mexicano que además se quedó con el nocaut más contundente de su carrera en el UFC ante un peligroso Kai Kara-France.
Alexandre Pantoja sometió a Alex Pérez y se mantiene muy cerca de ambos, si es paciente, podría pelear por el título cuando se defina a un campeón indiscutido entre el mexicano y el brasileño.
Los rusos -Magomed Ankalaev y Sergei Pavlovich- y los latinoamericanos -Michael Morales y Joselyne Edwards-, tuvieron motivos para celebrar con sendas victorias en la cartelera, que rebasó expectativas en muchos sentidos.
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Amanda Nunes tiene mucho más por pelear
Cuando destacamos la resistencia de un peleador o peleadora normalmente es porque está siendo castigado fuertemente y Julianna Peña tuvo que demostrar un corazón del tamaño de la arena para poder recorrer los 25 minutos con Nunes.
‘La leona’ recuperó el apetito, abrió su propio gimnasio y pudo desarrollar en secreto una estrategia desde la guardia zurda, que sorprendió a Julianna. Con el ajuste neutralizó el jab con el que la venezolana le hizo tanto daño en diciembre del año pasado y además mostró que su poder está de vuelta.
Su carrera estaba en juego, una doble derrota con Peña hubiera sido un golpe muy duro para alguien que ha terminado con todas las campeonas en la historia de las 135 libras.
El daño que causaba con sus golpes recordó a victorias como la de Cris Cyborg, Ronda Rousey o Miesha Tate. Está muy lejos de estar acabada y se mantiene como la doble campeona.
La trilogía sería justa para Julianna, que hizo historia cuando la venció y no entregó un solo segundo de la pelea, se levantó todas las veces que la mandó Amanda a la lona con su pegada y aún con una clara desventaja en las tarjetas, trabajó siempre en busca de una sumisión. Llegará, aunque tal vez no sea de forma inmediata.
El esperado nocaut para Brandon Moreno
El de Tijuana sigue ganando adeptos y volvió a tener a la tribuna de su lado en Dallas. Con una gran cantidad de mexicanos apoyándolo ante un Kai Kara-France que venía convencido de quedarse con ese cinturón interino en la revancha.
Pero Moreno estaba enfocado en una finalización que se le negó en UFC 270, la tercera pelea con Deiveson Figueiredo y que le costó el campeonato ante una cerrada tarjeta de los jueces. La lección fue clara y no querrá dejárselo de nuevo a los jueces, aunque eso implique correr más riesgos.
Kara-France conectó y Brandon se llevó mucho mayor daño en el rostro, pero una patada al hígado le costó la pelea y estableció el camino del título mosca. Moreno tiene que cerrar la tetralogía con Figueiredo.
El brasileño subió a la jaula y parece que la mala sangre podría quedar en el pasado. Se ofrecieron disculpas. Hora de hablar en la jaula en cuando Deiveson se recupere de sus lesiones.
Michael Morales es un diamante en bruto
Pocos prospectos latinoamericanos tienen las habilidades atléticas y el potencial del ecuatoriano. Segunda pelea en el UFC y segundo nocaut, es complicado no emocionarse con el invicto (14-0) de 22 años.
Desde que llegó al Entram Gym de Tijuana en el 2021, su evolución ha sido notoria pelea con pelea y tuvo todo el control ante Adam Fugitt, hizo mucho daño con sus golpes al debutante hasta que no pudo más. Si se mantiene con la cabeza fría y con pasos firmes, puede llegar muy lejos en las 170 libras.
Su buena lucha y el poder que viene desarrollando con sus manos representan una amenaza para todos en la categoría. Tremenda llegada al UFC.