Cerrado el sábado del GP de las Américas, que se ve por Star+, la gran pregunta para el domingo es: ¿por cuánto ganará Pecco Bagnaia? Es cierto, no se pueden contar los pollos antes de que nazcan, pero la ventaja lograda por el campeón de MotoGP en el circuito de Austin fue tan grande que su triunfo en la competencia principal pagará muy poco en las casas de apuestas. Es cierto, “las carreras no se ganan hasta que se baja la bandera”, decía Juan Manuel Fangio. Y el piloto oficial de Ducati deberá enfrentar las 20 vueltas que tendrá el recorrido de la tercera fecha del Mundial, aunque de no mediar un inconveniente en su moto o un error propio (no sería algo tan extraño), todo indica que se subirá al escalón más alto del podio.
Bagnaia voló en la clasificación y se quedó con la pole position. Desde el primer cajón de partida picó en el sprint y, de entrada, perdió con el sorprendente Álex Rins (al fin anduvo una Honda… y no fue oficial). Pero la punta le duró menos de media vuelta al español. Fue hasta que Pecco aceleró en una recta y el poder de su Desmosedici despeinó al ex-Suzuki y todos se convirtió en un paseo para el actual monarca. “Hice mi trabajo, mi ritmo y pude abrir una ventaja. Estoy muy feliz”, dijo Bagnaia, quien con el éxito en la competencia corta quedó a un punto de Marco Bezzechi (ganador en la Argentina y sexto en el srpint texano) en la cima del Mundial.
Detrás de la estela roja, Rins se quedó con el segundo lugar, que llegó a perder por un momento con Aleix Espargaró (Aprilia). Pero el mayor de los hermanos catalanes (Pol, el menor, sigue recuperándose de las lesiones que sufrió en Portimao, en la apertura del torneo) dobló abierto en una variante y perdió con Rins y Jorge Martín (finalmente tercero con la Ducati del Pramac).
Fabio Quartararo se fue masticando bronca. Después de meterse en la pelea con Espargaró y Martín, el francés, campeón 2021, se fue al piso con la Yamaha y se terminaron sus chances de anotar en el sprint.