LOS ÁNGELES -- En el vestuario de Golden State Warriors no hay ninguna duda de que el equipo está listo para llegar a los más alto en una temporada en la que sobra confianza. Una confianza que se han ganado a pulso los miembros de la plantilla y el cuerpo técnico, curtida a base de victorias y satisfecha con actuaciones como la llevada a cabo frente a Los Angeles Clippers, a quienes vencieron (110-106) en un encuentro que bien podría haber sido de playoffs.
Relucieron los de siempre, por un lado, Stephen Curry (27 puntos y cuatro asistencias) y Klay Thompson (25 puntos y cuatro asistencias) y por el otro un Blake Griffin estelar (40 puntos y 12 rebotes) y un Chris Paul decente en el trabajo ofensivo (27 puntos y nueve asistencias), pero incapaz de frenar a Curry en varias fases del encuentro. Véase la acción en la que literalmente deja en el suelo a CP3.
Y así, como los que no quieren la cosa, clasificados ya para playoffs como los líderes de la Conferencia Oeste, los Warriors sacaron todo su arsenal para llevarse la victoria. Esa es la mentalidad de un equipo que siente que está haciendo las cosas tan bien, que sienten cercano el sueño de lograr el campeonato.
"Tengo la certeza que podemos ser campeones, tenemos mucho trabajo por delante", declaró Leandro Barbosa (siete puntos y cuatro rebotes), el representante latino de unos guerreros más que enchufados. "Estamos muy felices de estar donde estamos ahora. Está terminando la temporada y estamos ajustando lo que tenemos que ajustar para el comienzo de playoffs. Estamos muy felices por lo que está aconteciendo y espero que salgamos campeones", apuntó.
Lo que estamos viendo de los Warriors es una versión mejorada de las píldoras que nos fueron dejando en las últimas campañas, donde sobre el papel eran favoritos para llegar a lo más alto, pero en la práctica nunca lograron pasar de la semifinal de conferencia hace dos temporadas y de la primera ronda en la campaña pasada. El equipo era similar y el cambio de coach parece haberle dado brío a una plantilla que cada pretemporada se veían a sí mismos como garantes de éxitos y epopeyas. Tras el fin de la campaña pasada, Mark Jackson dejó de ser entrenador de los Warriors y en su lugar llegó un Steve Kerr que ha dotado de más velocidad al juego de los californianos. Para él la clave del éxito reside en la construcción pasada.
"La clave es: grandes jugadores que han estado juntos durante un par de años. Que llegaron a esta temporada con un trabajo defensivo hecho que han construido en los dos últimos años con Mark y su cuerpo técnico", afirmó después del partido. "Un equipo que tenía mucho crecimiento por delante, sobre todo en ofensiva, especialmente por su juventud. El hecho de que han estado juntos y han establecido los fundamentos antes de llegar a esta temporada y su hambre. Sabían que eran buenos pero han querido ser mejores", sentenció.
Y así caminan hacia la postemporada, sin prisa, sin pausa, yendo a por los partidos importantes como si aún no estuvieran clasificados para los playoffs, como si no fueran los primeros del Oeste. Si las cosas finalizaran así, Oklahoma City Thunder serían los rivales potenciales de los Warriors, un rival que acudiría a la serie sin Kevin Durant en la que sería el enésimo revés a la hora de afrontar las eliminatorias.
"Los playoffs son muy diferentes a la temporada normal. Va a ser muy difícil pero tengo la certeza de que haremos un gran trabajo y saldremos con la victoria. Pero va a ser muy difícil. Westbrook es un gran jugador", afirmó Barbosa.
Aún le restan ocho juegos a Golden State para que pongan punto y final a la mejor temporada regular de la historia de la franquicia.