Luego de la derrota ante Inglaterra por 40-16 en los cuartos de final del Mundial de Japón, Michael Cheika anunció que cuando se termine su contrato el 31 de diciembre dejará su cargo de head coach de los Wallabies.
"Apenas se terminó el partido supe que iba a dejar el cargo, pero antes de anunciarlo quería tomarme un tiempo para hablarlo con mi gente", le dijo a medios australianos.
A principios de este 2019, el australiano de 52 años nacido en Sydney había avisado que la única forma de adjudicarse el derecho a quedarse al frente del seleccionado sería ganando la Copa del Mundo. Y a la hora de su anuncio, lo recordó: "No me arrepiento de haber dicho eso ni de haber tomado esta decisión".
De todas formas, quien en 2015 fue elegido como el mejor entrenador del año, reveló que el cariño que tiene con el grupo le daban ganas de seguir, pero que su decisión pasa exclusivamente por el aspecto deportivo. "Me hubiera encantado quedarme porque claramente estoy muy unido al equipo. Es realmente un honor hacer este trabajo. No se lo da a mucha gente y lo tomo con mucho orgullo y mucho honor", aclaró.
"Quería demostrar que estaba preparado para lograr lo que creo que el equipo podía conseguir. No lo cumplí y tengo que defender mi decisión."
El rugby australiano deberá comenzar a buscar a su reemplazo. Uno de los que corre con chances de asumir el cargo de head coach es el ex entrenador de los Chiefs, Dave Rennie.