La cuenta regresiva está activada porque cada vez falta menos para que las mejores tenistas del 2023 se encuentren en las WTA Finals de Cancún. Del 29 de octubre al 5 de noviembre, las ocho clasificadas se medirán en el torneo que consagrará a la nueva maestra de la gira femenina. El repaso del año de la primera de ellas: Aryna Sabalenka.
La bielorrusa conquistó su primera corona de Grand Slam frente a Elena Rybakina en el Australian Open: 4-6, 6-3 y 6-4.
Inició el calendario en Oceanía con una apabullante seguidilla de 11 triunfos que se expresó en dos títulos: el WTA 500 de Adelaida y el Australian Open. En su primera aparición en una definición de Grand Slam, la nacida en Minsk derrotó a Elena Rybakina por 4-6, 6-3 y 6-4 para ingresar en el selecto grupo de campeonas Major en actividad dejando atrás un año en el que había lidiado con bloqueos en su servicio -punto central de su juego- traducidos en cantidades de dobles faltas en momentos clave de los partidos.
Más adelante llegó la consagración en el WTA 1000 de Madrid sobre Iga Swiatek con quien comenzaría una carrera por el liderazgo del WTA Tour en la gira sobre polvo de ladrillo. En esa instancia, tomando revancha de la final que había cedido días antes en Stuttgart, superó a la número uno por 6-3, 3-6 y 6-3, convirtiéndose en una de las únicas tres tenistas que han podido derrotar a la polaca en definiciones WTA con Polona Hercog y Barbora Krejcikova.
El notable desempeño en los Grand Slams terminó de impulsarla como la líder de la carrera hacia las WTA Finals de Cancún. Además del título en Melbourne, la deportista de 25 años sumó final en el US Open y semifinales en Roland Garros y Wimbledon. La actuación en Nueva York, además, será recordada como la que le dio el empujón para arrebatarle el número uno del ranking a Iga Swiatek luego de 75 semanas consecutivas en esa posición. Durante todos estos meses acumuló 53 partidos ganados y 12 perdidos.
Tanto Iga como Aryna llegarán a México sabiendo que, para terminar el año en la cima, deberán dar lo mejor en la última gran cita del calendario.