El nigeriano Israel Adesanya se proclamó campeón interino de peso medio tras una guerra de cinco asaltos con el mexicoamericano Kelvin Gastelum en el evento coestelar del UFC 236 en Atlanta.
Gastelum tomó la iniciativa en el primer asalto, lanzó golpes al nigeriano y lo obligó a retroceder por momentos.
En el segundo y tercer asalto, Adesanya aprovechó su mayor estatura para establecer su estilo, conectar mejores golpes e incluso envió a lona al mexicoamericano, quien pareció quedarse sin gas.
El cuarto asalto fue una historia distinta, Gastelum se arriesgó e incluso logró derribar a Adesanya con su lucha, conectó una sólida patada a la cabeza que hizo huir al africano y buscó la pelea para emparejar el combate.
A pesar que ambos parecieron llegar sin energía al último asalto, Gastelum apostó todo a buscar el nocaut y se lanzó por Adesanya, quien estuvo cerca de encajar una guillotina de pie, pero Gastelum escapó. Adesanya aprovechó el ímpetu y se lanzó por su rival, al que castigó con golpes al rostro que enviaron al mexicoamericano en varias ocasiones en la lona.
Al final, los jueces recompensaron a Adesanya con tarjetas idénticas 48-46 para extender su invicto y levantar el título interino de peso medio, convirtiéndose en el décimo peleador en la historia del UFC en ganar un campeonato con récord inmaculado y segundo monarca africano, uniéndose a Kamaru Usman, quien recientemente ganó el título de peso wélter.
Luego de los cinco asaltos que duró la guerra, Adesanya reconoció a Gastelum diciendo que "Tiene el corazón de un mexicano".
"No pensaba en los jueces, solo necesito un asalto", declaró Adesanya tras el combate. "Estaba preparado para darlo todo ahí dentro, yo también tengo algo de mexicano dentro de mí".
Tras su victoria, Adesanya se perfila para enfrentar a Robert Whittaker y unificar el campeonato.