Con un enfrentamiento clave entre contendientes de peso gallo masculino de UFC Marlon Moraes (23-6-1) y Cory Sandhagen (12-2) que encabezará el evento de este fin de semana en "Fight Island" en Abu Dhabi, Emiratos Árabes Unidos, se siente como un buen momento para hablar sobre una de las divisiones más intrigantes de UFC.
En lo que respecta al panorama general de la promoción, la categoría de peso de 135 libras ha cambiado más que cualquier división durante el último año. Hubo un retiro repentino por parte del campeón; un nuevo campeón ocupó su lugar unos meses después; la aparición de nuevas caras; una afluencia de rostros familiares que son nuevos en la división; y la aparición de un prospecto pararrayos que ha llamado la atención desde lo más alto del deporte.
Entonces, echemos un vistazo a algunas de las historias en las 135 libras y analicemos cómo el resultado del sábado podría afectarlas.
¿Qué hay en juego este fin de semana?
Una oportunidad por el título está en juego, posiblemente, si eres Marlon Moraes.
En este momento, el contendiente número uno de facto en esta división es Aljamain Sterling, por una buena razón. Sterling no solo ha ganado sus últimas cinco peleas, contra buena competencia, sino que lo ha hecho de manera impresionante. Pregúntenle a cualquiera que sigue de cerca el deporte: "¿Quién merece ser el retador al título de peso gallo?" La respuesta es Sterling.
Ya el domingo por la mañana, esa respuesta podría cambiar para algunos. Si Moraes gana, estaría 6-1 en sus últimas siete, con su única derrota ante el ahora campeón retirado, Henry Cejudo. Moraes también noqueó a Sterling en el primer asalto de su pelea en 2017 y de hecho estaba programado para pelear contra Petr Yan, quien ahora es campeón, el verano pasado antes de que la pandemia de coronavirus sacudiera el calendario.
Si Moraes gana de manera impresionante el sábado, creo que UFC lo reservará en una pelea por el título contra Yan a fines de 2020 o principios de 2021. Sería una píldora difícil de tragar para Sterling, pero esa es mi suposición.
Una vez que se concrete la pelea por el título, ¿cómo se perfila el resto de la división?
¿Sabes quién es la pieza crucial del rompecabezas para esta pregunta? Frankie Edgar. Y sé que eso va a alterar algunas plumas. Edgar se ha convertido en ese tipo, a pesar de lo querido que es por la base de fanáticos, que parece como si tuviera una oportunidad por el título cada año, y el público está cansado de verlo.
Independientemente de eso, Edgar se hizo inmediatamente relevante en esta división cuando venció a Pedro Munhoz en un evento principal de cinco asaltos en agosto. Si Sterling no consigue su oportunidad por el título, creo que pelearía con Edgar. Y si Sandhagen gana este fin de semana y Sterling recibe su oportunidad por el título, creo que Sandhagen pelearía contra Edgar. Entonces, esta pelea del sábado tiene ramificaciones importantes, y de cualquier manera, creo que el futuro inmediato de Edgar se verá afectado.
¿Cejudo sigue siendo un factor en todo esto?
No lo creo. El retiro de Cejudo en mayo fue sorprendente, pero se vuelve menos sorprendente con cada día que pasa. Tiene sentido. Cejudo no estaba lo suficientemente motivado para quedarse y pelear contra tipos como Yan, Sterling, Moraes (de nuevo), etc. No valía la pena exprimir el jugo para él. ¿Peleará de nuevo? Todavía digo que sí. Pero está en una posición en la que algo realmente tiene que caer en su regazo. Una oferta a la que no puede negarse. Y por muy bueno y competitivo que sea el peso gallo, no hay una pelea en este momento que traiga de regreso a Cejudo. Eso podría cambiar en cualquier momento. Este deporte se mueve rápidamente. Pero no se avecina nada en este momento.
¿Quiénes son los wild cards que podrían sacudir esta división durante los próximos 12 meses?
En primer lugar: TJ Dillashaw, el ex campeón que dio positivo a EPO en enero de 2019 y regresa a ser elegible en enero de 2021. Dillashaw es un nombre y un luchador de clase mundial. Habrá mucha intriga sobre su regreso, muchas preguntas sobre si podrá reparar el daño que ha hecho a su reputación. La reincorporación de Dillashaw a esta división de peso tiene el potencial de cambiar las cosas enormemente.
Segundo: Merab Dvalishvili. Está cerca de la cima de la lista de luchadores de UFC que se han distinguido durante estos tiempos pandémicos de 2020. Tiene 3-0 este año, y está programado para pelear contra Cody Stamann en diciembre en Las Vegas. Como luchador es una pesadilla, una bola de energía perpetua. Es un enfrentamiento potencialmente malo para muchos y quiere pelear todos los fines de semana. Eso equivale a un tipo que puede cambiar las cosas.
En tercer lugar, haremos un empate: Marlon Vera y Sean O'Malley. Sé que algunos dirán: "¿O'Malley? ¡Dale crédito a Vera! ¡No lo pongas con O'Malley! ¡Acaba de vencer a O'Malley!" Y sí, eso es cierto, pero la verdad es que O'Malley todavía tiene mucho poder estelar en esta división, y eso no se ha perdido con una derrota. O'Malley no va a desaparecer durante el resto de 2020 y 2021. Va a tener peleas relevantes y de alto perfil, y veremos qué hace en ellas. Y probablemente seguirá haciendo lo suyo en las redes sociales y captando la atención.
Vera está aprovechando el impulso de esa victoria por nocaut técnico sobre O'Malley en agosto. Vera nunca ha estado tan caliente en sus cinco años con UFC, y creo que UFC lo sabe y lo aprovechará. Vera va a tener una pelea significativa, y va a tener ojos sobre él cuando lo haga. Si gana su próximo combate, entrará en la contienda por el título y tiene una personalidad que resonará entre los fanáticos.
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