¿Los Golden State Warriors necesitan de Kevin Durant? Esta interrogante parece servir de fundamento para el punto álgido de esta semana, originado por la discusión en la cancha y el vestidor entre Durant y su compañero Draymond Green, debido a la decisión de este último de no darle el balón a Durant durante los momentos finales del tiempo de regulación en la derrota sufrida por los Warriors en tiempo extra a manos de los LA Clippers el pasado lunes.
Intencional o no, cuando los Warriors decidieron suspender a Green por un partido por sus acciones, la organización envió un mensaje de que tenían predilección por Durant, quien podría convertirse en agente libre sin restricciones el próximo verano y no se ha mostrado dispuesto a comprometerse para así quedarse con Golden State. Mientras la organización de los Warriors sopesa como tratar a Durant durante los próximos ocho meses y medio, su importancia debe formar parte de los cálculos.
¿Tendría Golden State probabilidades de ganar el campeonato sin Durant? ¿Qué clase de impacto tendría su salida, dentro de la flexibilidad de los Warriors dentro del tope salarial? Revisemos.
Imaginamos un Golden State sin Durant
Adelantemos la película hasta julio de 2019 y digamos que Durant ha firmado con otro equipo. ¿Cómo se vería el roster de los Warriors? Presumiendo que Klay Thompson vuelva como agente libre sin restricciones, eso significaría que Golden State tendría a ocho agentes bajo contrato: los titulares Green, Klay Thompson, Stephen Curry y Damian Jones; aparte de los suplentes Jacob Evans, Andre Iguodala, Shaun Livingstone y Alfonzo McKimmie.
Siempre y cuando Thompson regrese, los Warriors no tendrán, realistamente hablando, suficiente espacio dentro del tope salarial para traer de vuelta a DeMarcus Cousins, quien también es agente libre sin restricciones. Debido al hecho que Cousins jugó apenas una temporada en Golden State, los Warriors se encuentran limitados a ofrecerle no más de un aumento del 20 por ciento (un pacto por un año y $6.4 millones) utilizando derechos “no Bird”. Crear espacio dentro del tope salarial para ofrecerle una cantidad mayor de lo anterior a Cousins sería complicado.
Incluso sin tener que devengar el salario de Durant, Golden State se mantendría comprometido con los $28.5 millones destinados a Thompson que afectan al tope salarial. A fin de crear mayor espacio dentro del tope salarial, el equipo tendría que rescindir el contrato de Livingston, extender la porción garantizada de su salario para 2019-20 por $2 millones y canjear a Green o Iguodala. Incluso bajo estas circunstancias, negociar a Iguodala y renunciar a los derechos sobre el resto de los agentes libres (incluyendo los suplentes dentro de la rotación Jordan Bell, Quinn Cook, Jonas Jerebko y Kevon Looney) le daría a los Warriors una cifra estimada de $10 millones aproximadamente en espacio dentro del tope salarial, lo cual probablemente no sería suficiente para ser competitivos a la hora de ofrecer un pacto a largo plazo por Cousins.
Por ende, lo más seguro es asumir que un Golden State sin Durant en 2019-20 se parecería mucho a los equipos montados por los californianos antes de Durant, con Curry, Green y Thompson formando el núcleo. Si los Warriors deciden rescindir a Livingston, probablemente tendrían la oportunidad de utilizar la excepción a nivel medio para no contribuyentes al impuesto al lujo (estimada en $9.2 millones) para así aportar mayor profundidad en las alas. Digamos que terminan firmando a Tyreke Evans, quien se reunió, según informes, con la organización el pasado verano antes de que Cousins se hiciera disponible y traer de vuelta a sus suplentes agentes libres. Aquí les mostramos como se proyectaría dicha rotación, utilizando la versión multianual y predictiva de la métrica real plus-minus de ESPN (RPM):
Las proyecciones de la métrica RPM colocan a los Warriors de la temporada 2019-20 sin Durant como un equipo que estaría al límite del Top 5 tanto en ofensiva (dicha proyección lo coloca como el cuarto puesto entre los equipos este año) como en defensiva (quinto), con proyección promedio de 53 triunfos. Dicha cifra los colocaría en el cuarto lugar de las proyecciones de este año, sin incluir la proyección actual de los Warriors y dentro de una distancia no muy lejana del tope: Luego de las 60.3 victorias proyectadas de Golden State, ningún otro equipo superaba las 55.
Si les suena absurda la idea de Golden State alejado de la categoría de las mejores ofensivas de la NBA con Curry, tengan presente cuánto le ha costado a los Warriors anotar sin Curry y Durant presentes en la cancha durante poco más de los últimos dos años. Durante un periodo cercano a los 500 minutos durante la temporada regular 2017-18, según NBA Advanced Stats, sumaron rating ofensivo de 98.2 cuando Green y Thompson jugaban sin Curry y Durant en la cancha. Esto los habría ubicado en el sótano de la liga durante el transcurso de la temporada por amplio margen.
También tenemos el tema de la edad, que comenzaría a afectar al núcleo de Golden State. Curry cumplirá 31 años en marzo próximo, Green y Thompson cumplirían 29 durante la primavera e Iguodala, el sexto hombre, llegará a sus 35 años en 2019. Si bien Durant tiene una edad similar (30), la presencia de tantas estrellas ha ayudado a que los Warriors puedan mitigar los efectos de un fuerte kilometraje, ya que todos son capaces de distribuir la carga entre ellos.
¿Tendría posibilidades Golden State sin Durant?
En lo positivo: si se mantienen sanos, los Warriors sin duda serían mejor equipo durante los playoffs, en comparación con la campaña regular. No solo tendría Steve Kerr la capacidad de extender los minutos de sus estrellas veteranas a ese punto. Además, la experiencia de Golden State en los playoffs les aportaría una ventaja comprobada con respecto a los retadores más jóvenes que buscan asumir el trono. Favorecería a los Warriors sobre cualquier otro contendor de la Conferencia del Oeste en estos momentos.
Esas ultimas tres palabras son claves, ya que muchas cosas podrían cambiar dentro de los equipos rivales antes de octubre del próximo año. Si bien una posible ventaja de Golden State dependería en gran parte del sitio al cual llegaría Durant si decide partir, también depende si otros agentes libres renuevan con sus respectivos equipos (siendo los casos de Jimmy Butler, Kyrie Irving y Kawhi Leonard los más notables) y cómo los Lakers, particularmente, deciden utilizar su espacio dentro del tope salarial al máximo nivel durante el próximo verano.
Todo lo anterior es testimonio de la calidad de los Warriors antes de la llegada de Durant (ganaron el título en 2014-15 y un récord de 73 encuentros durante la temporada regular 2015-16) que incluso podríamos contemplar la posibilidad de que éstos pierdan a uno de los mejores jugadores de la NBA y mantener su estatus de contendores al campeonato. Sin embargo, el hecho de que no necesariamente éstos se vean favorecidos sin la presencia de Durant podría explicar el por qué una franquicia que aspira permanecer a años luz de la competencia estaría dispuesta a hacer todo lo que esté a su alcance para asegurarse de que Durant renueve con ellos.