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          Las críticas de Manny Ramírez, aunque bienintencionadas, están incorrectamente justificadas

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          La todavía joven carrera de Vladdy Jr. ha sido eléctrica (1:45)

          Echamos un vistazo a los momentos más eléctricos en la carrera de Vladimir Guerrero Jr. (1:45)

          • Juan Arturo Recio
          16 de sep, 2021, 19:29 ET

          El expelotero dominicano hizo saber su inconformidad con la forma en la que se votan las premiaciones de final de temporada de Grandes Ligas, cuando salió en defensa de Vladimir Guerrero Jr.

          Manny Ramírez ha sido noticia durante los últimos días en la República Dominicana luego de dar unas declaraciones en las que públicamente criticó el sistema de votación para los premios de las Grandes Ligas, mientras salía en defensa de Vladimir Guerrero Jr., quien se encuentra en una competición sumamente cerrada con Shohei Ohtani por el galardón de Jugador Más Valioso de la Liga Americana.

          Mientras daba el razonamiento del por qué entendía que con Guerrero Jr. “quieren hacer una injusticia”, debido al hecho de que Ohtani figura como favorito por el mencionado premio, Ramírez recurrió a unas justificaciones que, a pesar de ser bienintencionadas, son incorrectas.

          Ramírez empezó diciendo que, en el 2019, a Miguel Andújar, “le quitaron” el premio Novato del Año en 2018 y aunque ciertamente, el dominicano de New York Yankees le llevaba ventaja al japonés en múltiples departamentos ofensivos, la capacidad de Ohtani para lanzar 51.2 entradas con una efectividad de 3.31 y un promedio de bases por bolas e imparables por entrada lanzada (WHIP) de 1.161, se impusieron ante un Andújar que tuvo una muy mala defensa para complementar su bateo.

          El segundo argumento de Manny Ramírez fue que al igual que le habían hecho en el pasado, estaban cometiendo una injusticia en contra de Vladimir Guerrero Jr. y procedió a señalar que, según su desempeño, el exjardinero debió tener por lo menos cuatro premios de Jugador Más Valioso y citó los ejemplos puntuales de las temporadas 1999 y 2008.

          En el primer caso (1999), Manny Ramírez quedó en un empate en tercer lugar por el premio MVP de la Liga Americana como miembro de Cleveland Indians. Ciertamente, Ramírez tuvo una espectacular temporada en ese año quedando como líder de MLB en carreras remolcadas (165), slugging (.663) y OPS (1.105), pero se vio de frente con una de las mejores temporadas en la historia de la liga para un receptor en Iván Rodríguez, quien terminó ganando el premio.

          Adicionalmente, en segundo lugar, quedó Pedro Martínez con la que hasta ese momento había sido la mejor temporada estadística en la historia de Grandes Ligas para un lanzador abridor (a juicio del autor, quien debió ganar el premio MVP ese año) y lo que terminó siendo el último clavo en el ataúd de las aspiraciones de Ramírez, empató con su compañero de escuadra, Roberto Alomar, quien lógicamente, al pertenecer al mismo equipo, dividió el voto de los periodistas con respecto a ellos dos.

          Con el 2008 no entraremos en muchos detalles, solamente hay que entender que Manny Ramírez fue cambiado a Los Angeles Dodgers en la Liga Nacional. “El Acorazado” solo jugó 100 partidos en el “Joven Circuito”, no existiendo nadie que haya ganado el premio MVP con menos de 130 juegos disputados como jugador de posición, desde que se juegan 162 partidos en una temporada.

          Finalmente, el último argumento de Ramírez fue decir que Mike Trout ha sido favorecido sobre otros con el premio Jugador Más Valioso. La realidad es que el jardinero de los Angels fue el mejor jugador de la década pasada y aunque en algunas ocasiones se pudo argumentar que otros tenían más mérito que él (Mookie Betts en 2016, por ejemplo), no es menos cierto que en las tres ocasiones en que lo ha ganado, sus números generales son de un Jugador Más Valioso. En resumidas cuentas, la frustración de Manny Ramírez con los votantes, aunque tiene su explicación, está mal dirigida. Se puede estar en desacuerdo y se puede pedir que el sistema cambie, pero no sobre la base de señalar supuestas “injusticias” personales.

          En el caso de Ohtani y de Guerrero Jr., ambos han tenido magníficas temporadas y tienen méritos para ser MVP de la Liga Americana, pero todavía queda béisbol que jugar y un cierre de campaña sensacional. Ahí podrían decidirse las cosas.