SAN JUAN - Lino Rivera llegó a casa como visitante. El mánager boricua viene a la Serie del Caribe de San Juan 2020 al frente de los Toros del Este, campeones de la República Dominicana, que abrieron con triunfo de 2-1 sobre los Tomateros de Culiacán.
"Estoy muy feliz de estar aquí, de reencontrarme con tantos amigos, con mi familia, pero al mismo tiempo vengo a poner en alto el nombre de República Dominicana, que me ha acogido como uno más", expresó Rivera, quien obtuvo su segunda corona de LIDOM, luego de la primera con las Águilas Cibaeñas en 2018.
"Esta es especial, porque era un sueño para mí dirigir a República Dominicana en el estadio Hiram Bithorn, a poca distancia del lugar donde crecí", manifestó.
Lino Rivera dio a sus jugadores todo el crédito de su éxito, en un año en que los Toros dominaron LIDOM de principio a fin.
"He tenido la bendición de contar con grandes peloteros bajo mi mando, con quienes he logrado establecer una buena comunicación, que creo que es la clave de tener buenos resultados", sostuvo.
"Lo importante es tener la compenetración con tus muchachos, conocer sus capacidades y necesidades", destacó.
"Por ejemplo, hoy (Yunesky) Maya nos dio muy buenas cinco entradas en blanco con solo 69 pitcheos, que es lo que le habíamos pedido. Cuando le pregunté, me dijo que estaba dispuesto, pero lo dejaba en mis manos y ahí me di cuenta que aunque no lo expresara, estaba cansado", explicó el dirigente boricua-quisqueyano.
"Yo tengo tremendo bullpen, así que no tenía por qué forzarlo, para tenerlo disponible en el sexto juego, que será la semifinal, así como a Jorge Martínez, el pitcher del segundo día, para el último juego de la final, porque vinimos a ganar", sentenció el estratega de los Toros.
Por su parte, Maya limitó a la ofensiva mexicana a dos hits, ambos salidos del bate de José Guadalupe Chávez, con cinco ponches y un pasaporte.
A sus 38 años, el cubano que fue siete años campeón juvenil de kárate en la provincia de Pinar del Río antes de dedicarse al béisbol, sigue sacando outs con una tranquilidad pasmosa, con su tremenda curva y excelente control.
"No hay secreto. Todo está en el trabajo duro de cada día. Yo me entrego a esto 100 por ciento y cuando tú trabajar fuerte, los resultados salen", manifestó el derecho, que ha sido campeón en LIDOM con cuatro equipos diferentes.
"Por la edad no te preocupes, yo voy detrás de Raúl Valdés (42 años). Mientras él siga lanzando, yo también lo haré", señaló Maya refiriéndose a su compatriota, abridor del juego decisivo que le dio a los Toros la corona dominicana.