LOS ÁNGELES -- La selección puertorriqueña de beisbol ya está en Los Ángeles para seguir con la misión que se trazaron hace cuatro años.
Puerto Rico ha dominado el Clásico Mundial de este lado del planeta, pero los peloteros boricuas están conscientes de que de nada servirá lo que ha pasado durante las primeras dos rondas del torneo si no completan el trabajo y el primer paso en la última parte de la misión se da este lunes contra Holanda.
El equipo boricua ha reiterado hasta el cansancio que para ellos sólo sirve el campeonato, que lo demás sale sobrando.
“El viaje (a Los Ángeles) fue fantástico. Fueron como dos horas y media o tres para llegar aquí, directo al parque”, afirmó el manager Edwin Rodríguez. “Estamos listos para comenzar a trabajar y para que los muchachos conozcan la manera en que la pelota rebota y corre en el terreno“.
Los puertorriqueños llegaron directo a entrenar desde San Diego, donde dieron cuenta de manera categórica de sus tres rivales en la segunda ronda: República Dominicana, Estados Unidos y Venezuela.
“El cuadro interior es fantástico. Es uno de los mejores en Grandes Ligas”, indicó Rodríguez sobre el diamante del Dodger Stadium. “Así que esta práctica ayudará a que los jugadores se acostumbre al campo. Sólo un trabajo ligero durante una hora y 15 minutos, una hora y 20“.
Rodríguez aseguró que la mentalidad no ha cambiado desde que reportaron a su primera concentración en Arizona el pasado 7 de marzo y que la mentalidad de la novena caribeña es “una pitcheo y un juego a la vez“ y que la única preocupación es el partido siguiente, sin pensar más allá, con la esperanza de conquistar el premio mayor.
Puerto Rico anotó 22 carreras en la segunda fase y sólo permitió ocho y en lo que va del torneo suma 49 a favor y sólo 15 en contra.
A la defensiva, los boricuas también han jugado un beisbol limpio, con mínimos errores y con innovaciones, la principal, el gran desempeño de Carlos Correa, el campo corto sensación de los Astros de Houston, quien se ha desempeñado en tercera base como si fuera un All-Star consumado en Grandes Ligas.
Correa nunca había jugado la tercera base, ni siquiera en ligas pequeñas.
“Nunca voy a olvidar este torneo, en especial jugando la tercera base. Lo mejor para el equipo era que jugara la tercera base y por eso me moví. Hasta ahora he hecho un buen trabajo“,señaló Correa.
El pelotero de 21 años tuvo que moverse a la antesala para que su compatriota de los Indios de Cleveland, Francisco Lindor, jugará en las paradas cortas como exigió su equipo ligamayorista.
En ese mismo cuadro está el otro joven sensación, Javier Báez, de los Cachorros de Chicago, quien completa la tercia juvenil de los boricuas que tanta expectativa causó previo al torneo.
“Esta es la primera vez que estos jóvenes jurgan juntos, pero se han visto y apoyado siempre. Se conocen. Se observan con sus equipos y están orgullosos el uno del otro. Cada vez aumentan más su confianza como equipo“, afirmó el piloto caribeño.
Puerto Rico enfrentará a una novena holandés también plagada de juventud y talento, aunque ya con experiencia en Clásico Mundial. De hecho, jugarán Semifinales por segunda edición consecutiva.
“La clave, como durante todo el torneo, será ser agresivos, pero al mismo tiempo, selectivos con los lanzamientos”, señaló Rodríguez. “Seremos agresivos en las bases (…) y los lanzadores van a ser agresivos y atacarán la zona de strike“.
Puerto Rico enviará a la loma a Jorge López (1-0, 2.08), quien realizará su segunda apertura del Clásico tras enfrentar a México en la primera ronda.
“Tuve la oportunidad de ver los partidos (de Holanda) contra los Arizona Diamonbacks y creo que sólo voy a seguir lo que (el catcher) Yadier (Molina) me pida, que es ejecutar cada lanzamiento, cualquiera que me diga. La clave será la comunicación“, destacó López.
El serpentinero enfrentará al abridor holandés Rick Van Den Hurk (1-0, 6.43), quien derrotó a Corea en su primer partido en cuatro entradas con pelota de tres hits. Cinco días después fue apaleado por Japón en tres innings con siete hits y cinco carreras.
“Hemos estudiado a los bateadores y lanzadores (de Holanda)“, afirmó el manager Rodríguez. “Vamos a establecer nuestras estrategias contra Van Den Hurk. Estamos concentrados para el juego de mañana“.
La segunda semifinal se disputará el martes entre la otra novena invicta del Clásico, Japón, que se medirá a Estados Unidos.
La Final se juega el miércoles en el mismo Dodger Stadium.
Sale León, entra Piñeiro
El abridor puertorriqueño José de León, ganador del partido del sábado pasado contra Venezuela, fue excluido de la rotación y su lugar será ocupado en el roster de su selección nacional por Joel Piñeiro.
El gerente general del equipo boricua, Alex Cora, dijo que el acuerdo con el equipo de De León en Grandes Ligas, los Tampa Bay Rays, era que sólo abriría un partido.