El piloto mexicano dijo que dos de los pilotos de Penske, Josef Newgarden y Scott McLaughlin le tienen resentimiento porque opinó que los tenían que castigar
INDIANAPOLIS.— Pato O’Ward habló y fue claro hace una semana cuando dijo que los autos Penske que estaban fuera de reglamento tenían que ser sancionados y mandados a la última fila de las 500 Millas de Indianápolis, eso ahora le ha traído el resentimiento de Josef Newgarden y Scott McLaughlin, pero al mexicano no le importan, dijo: “están ardidos” y la victoria de 2024 “está manchada”.
En entrevista con ESPN Digital, Patricio O’Ward expresó que no cayó bien entre ese par de colegas del equipo Penske, pero que es algo que todos piensan en la serie.
“Las penalizaciones, como buen mexa, no es mi p**o, es su problema y realmente yo estoy enfocado en mis cosas, pero yo siento que fue lo justo decir lo que todos los demás querían decir, pero yo fue el que lo dijo primero”.
“Sí, sí andan ardidos, porque Josef sí se ve bastante ardido, pero de hecho no dije que era problema de los pilotos, te aseguro que ellos no tenían idea, yo no habría tenido idea si yo estuviera en esa posición. Tú te enfocas en lo que tú tienes que hacer como piloto, pero los ingenieros, tú tienes que confiar en ellos, que estén todas las cosas que se valen”, dijo Pato.
Josef Newgarden estuvo en conferencia de prensa, como los otros 33 pilotos, pero se negó a contestar cualquier pregunta relacionada con la sanción que tuvo, junto a Will Power por la modificación ilegal de los atenuadores de sus autos.
Newgarden tampoco quiso hablar de los despidos del presidente del Team Penske Tim Cindric y de los directivos de Indycar, Ron Ruzewski y Kyle Moyer.
“Power ha estado bastante bien conmigo, pero Newgarden y McLaughlin están un poco ardidos, lamentablemente no me importa, porque yo no di opiniones, yo di una respuesta, yo sólo dije lo que todos quieren decir”.
“Tristemente, el dueño de la serie es el dueño de ese equipo y a los únicos que los están cache y cache haciendo trampas, son ellos”, señaló Pato O’Ward.
Después de la conferencia de prensa de Josef Newgarden, se topó por coincidencia con Pato O’Ward que estaba atendiendo a otros medios. Subieron juntos al elevador del centro de prensa del Indianapolis Motor Speedway. Estaban hombro o hombro, pero no se dirigieron la palabra en todo el recorrido. El rostro del piloto de Penske se endureció y Pato, al notarlo lo evitó con la mirada.
Estos pilotos, que antes eran muy cordiales el uno con el otro, que pelearon con lealtad, rueda a rueda, en el final de la Indy 500 2024, ahora no se dirigen la palabra
La victoria de Newgarden está manchada
Pato O’Ward también dijo que no le habría gustado ganar en la mesa la Indy 500 de 2024, luego de que se supo que el auto que usó Newgarden tenía la modificación ilegal en los atenuadores, por la que en 2025 fue sancionado, pero sí reafirmó que, para él, esa victoria ahora luce como manchada.
“Yo entiendo que la victoria de Josef del año pasado está manchada y a nadie le gustaría eso, ¿no?”.
Pato aún no tiene el auto que quiere
El regiomontano de 26 años de edad y que arrancará por sexta vez en el Óvalo Sagrado de Indianapolis, no está confiado, porque aunque calificó en tercer lugar, sabe que le falta hacer ajustes que sólo podrá encontrar, con suerte, en la dos horas de la práctica final del viernes, el llamado ‘Carb Day’.
“No, no lo tengo (el mejor auto que ha manejado en Indy) y tenemos dos horas más para asentarlo al detalle (Carb Day), pero no”, reiteró O’Ward sobre cómo se siente con el monoplaza. “Diría que el auto que yo traía en 2023, era bastante rápido”.
Los Penske son unos misiles
Pato señaló que no se siente confortable en el tráfico, tiene la sensación de que se atora al tratar de circular entre otros autos. Lo que sí tiene claro es que los autos que se ven mejor en pista son los polémicos Penske.
“El único que he visto empezar quinceavo y remontar es el carro de Newgarden”.
“Eso no cambia nada (la sanción), siguen teniendo unos misiles y Josef va a estar ahí al final. Ese auto junto con el de sus coequiperos Newgarden y McLaughlin tienen los mejores tres autos de la parrilla y el que haga buen trabajo de irse por el tráfico van a estar ahí al final; yo no espero que estén allá atrás batallando, no importa que empiecen al último, no van a acabar ahí, pero nosotros estamos listos para enfrentar al que sea”, agregó
Pato O’Ward se siente más fuerte que nunca
A pesar de los problemas por resolver en el auto, Pato O’Ward se siente más fuerte que nunca para buscar la victoria.
“Tenemos una gran oportunidad el domingo de hacer un gran show, es la mejor arrancada que he tenido en la Indy 500, en la primera fila”.
“Confiado, nunca, porque esta carrera cambia mucho de la vuelta 1 a la vuelta 10 a la vuelta 50, a la 120 y a la 200, pero me siento más fuerte que nunca para ponernos en esa situación, otra vez, para ganar”.
¿Qué hará Pato O’Ward antes de las 500 Millas de Indianapolis?
No tiene un ritual previo de carrera, pero Pato O’Ward sí contó lo que come siempre antes de las 500 Millas de Indianapolis.
“No (tengo ritual de carrera), me gusta estar tranquilo, me gusta echarme mi pastel el día antes, pastel de chocolate. Sí me gusta echarme mi pastel de chocolate antes de la carrera y ya”.
“(Para desayunar) normalmente no tengo mucha hambre, pero me gusta mi pan tostado con crema de cacahuate y alguna frutilla, frambuesa, blueberry”.
¿Cómo festejaría Pato O’Ward si gana las 500 Millas de Indianápolis?
-¿Si tuvieras que escoger entre ganar esta carrera o correr alguna vez en F1”
“Ganar Indy 500”.
¿Cómo se corren las 500 Millas de Indianápolis?
“Con paciencia, con mucha paciencia, con confianza en tu auto, porque si no, no vas a adelantar a nadie”.
¿Cómo festejarías esto?
“Con leche y tequila. En mi casa, seguramente voy a terminar agotado”.