Sebastián Viera se despidió de Barranquilla con un homenaje. El portero fue acompañado por exfutbolistas, directivos y fanáticos que se acercaron para darle cariño por su larga trayectoria en Atlético Junior. El uruguayo, muy emocionado, colocó sus manos en la Ventana de Campeones y luego dedicó palabras para agradecer todo lo vivido.
Fueron doce años, siete títulos, trece goles y muchas vivencias que pasó el arquero de Uruguay desde que llegó a Barranquilla. Ya con el Bolillo Gómez en el banco, el entrenador optó por buscar nuevas alternativas para el arco del Rojiblanco y el propio Fuad Char confirmó que ya están negociando por Santiago Mele de Unión.
Viera vivió un emotivo último encuentro con el pueblo juniorista, que dijo presente para celebrar con él. Durante el festejo, Viera tomó la palabra y se subió al escenario para dar un breve discurso. "Cuando llegué acá era un ignorante que no conocía lo que era Barranquilla y Junior. Gracias a todos aprendí a amar al club y a vivir como jugador de Junior. Llegar me cambió la vida en todo sentido de la palabra".
"No fue fácil ser el capitán, pero disfruté mucho. Me voy muy agradecido y estoy a disposición de los barranquilleros. Junior me dio una familia, alegría, felicidad. Encontré mi lugar en el mundo. Estoy pasando por días raros pero ustedes me lo hace fácil con su agradecimiento. Llegué solo y me voy con una familia formada y mucho cariño, es lo más valioso que me dio el club. Agradezco a los Char por confiar en mí hasta cuando yo no estaba bien", agregó mientras la emoción invadía su relato y los junioristas cantaban por él.
Además, el arquero recibió la medalla Ciudad de Barranquilla categoría oro grado comendador, por su trayectoria como arquero, ídolo de jóvenes y embajador deportivo de la ciudad.