BARCELONA -- Ausente Leo Messi en el estreno liguero del Barcelona por lesión, en San Mamés se sumó otra mala noticia con la sufrida por Luis Suárez, quien debió abandonar el terreno de juego poco después de la media hora de partido aquejándose del gemelo.
Este sábado, en Barcelona, a Suárez se le practicará una resonancia magnética para conocer el alcance de la lesión y estimar un periodo de baja que podría apartarle del equipo de cara al partido de la segunda jornada frente al Betis.
El delantero uruguayo, quien se perdió el final de la pasada temporada al operarse de la rodilla, regresó en plenas condiciones después de las vacaciones y actuó a buen rendimiento durante la pretemporada, formando una buena línea de ataque junto a Griezmann y Dembélé, que se repitió en el debut liguero, obligado por la falta de Messi.
Su paso por San Mamés, sin embargo, quedó desdibujado desde el primer minuto, apareciendo en cuentagotas y empezando a dar síntomas de dolor muscular antes de llegarse ya a la media hora de partido. Aprovechó un error de la defensa del Athletic para lanzar un disparo al palo… E inmediatamente pidió el cambio al banquillo azulgrana.
Sustituido por Rafinha, lo que provocó un cambio de posiciones en la delantera, Suárez se puso hielo en la pierna, a la espera de estas pruebas para conocer el alcance de la lesión