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Padre de Saraiva: "No era la ruta prevista para lo que se estaba dando en la carrera de Marcelo"

Marcelo Henrique Saraiva ha acompañado a su hijo en su carrera como futbolista profesional

SACATEPÉQUEZ -- El exfutbolista brasileño Marcelo Henrique Saraiva hay guiado la carrera de su hijo Marcelo Andrés desde siempre. El sudamericano, que ahora es agente, destacó en el fútbol guatemalteco desde el 2000. Jugó para Comunicaciones FC, Municipal, Heredia y Suchitepéquez. Ganó dos títulos de liga.

Ahora vive una nueva faceta, en la que promueve talento y se encarga de proyectar la carrera de su hijo, quien nació en Guatemala, pero creció en Brasil. Marcelo Andrés Saraiva, de 20 años, es el nuevo jugador de Antigua GFC, luego de su paso por el Nottingham Forest Football Club.

Saraiva se sinceró con ESPN Digital y contó que pasar por el fútbol guatemalteco no estaba en los planes, pero las circunstancias del fútbol así lo demandaron. “No estaba prevista esta ruta para lo que se venía dando en la carrera de Marcelo, pero tuvimos algún contratiempo en negociaciones, las cosas no se dieron como se esperaban y no podíamos seguir esperando más tiempo sin que el compitiera y sumara minutos”.

“Antigua nos abrió las puertas para que pudiéramos venir, competir y que trate de ser el mejor. A partir de ahí oportunidades vendrán para que pueda buscar el regreso a Europa. No podíamos esperar 15 o 20 días en alguna negociación que estaba caminando, no quisimos correr riesgos y aprovechamos la oportunidad para que él empiece a competir”.

Marcelo Andrés firmó un contrato que lo liga al equipo antigüeño por un año, con opción de salida en cualquier momento. “Antigua, así como abrió las puertas para que viniera, está con total disponibilidad de dejarlo ir en algún momento”.

El padre de Marcelo afirma que su hijo ya ha quemado etapas formativas y está listo para ser regular en el fútbol profesional. “La transición de fuerzas básicas al fútbol mayor, él la tuvo en el Nottingham Forest Football Club. Hizo todo el trabajo con el plantel mayor, le fue bien, lastimosamente no tuvo la chance de debutar con el plantel mayor, pero hacía los juegos amistosos con el plantel mayor en una dinámica distinta de lo que es el fútbol de acá”.

El juvenil viene de tres meses de inactividad y lo primero en el equipo de Ramiro Cepeda será volver a tomar ritmo para ganarse un puesto y aportar a la causa aguacatera. “Que él imponga todo el trabajo que viene haciendo desde su formación. Nada distinto de lo que él ya hace. Que imponga su juego, su fútbol, su ritmo, todo lo que ya aprendió, toda la capacitación que tuvo, tanto en Brasil, como en Inglaterra, para intentar sacar el máximo provecho acá”, es lo que espera su padre.