Aston Villa sorprendió a los 'Gunners' en el Emirates Stadium y alteró por completo la carrera al título de la Premier League
LONDRES -- Dos zarpazos en los minutos 84 y 87 rubricaron un partido soberbio del Aston Villa de Unai Emery, resistente en el primer acto y ambicioso en el segundo y que asestó un golpe duro a las esperanzas por el título del Arsenal, que suma su pinchazo (0-2) al del Liverpool para convertir al Manchester City en líder en solitario de la Premier League y gran vencedor de la jornada.
El domingo perfecto para Pep Guardiola se cerró, tras la sorpresa de Anfield, con un premio en el Emirates Stadium. Quiere puesto de Champions League el Aston Villa, al que Emery ha impulsado en un salto de calidad abismal, con un estilo definido, siempre asociado al gol.
Resistió los mejores momentos del Arsenal y lo sometió desenchufando su fútbol eléctrico de la red en la segunda mitad para acabar golpeándolo sin piedad.
Es la historia reciente que quiere cambiar el técnico español Mikel Arteta. La de un equipo asociado al buen fútbol que a la hora de la verdad siente vértigo ante la presión. En una semana en la que mide su realidad en la Liga de Campeones ante un ogro como el Bayern Munich, se tambaleó frente a un Aston Villa firme. Sostenido por el 'Dibu' Martínez y un imperial Diego Carlos. Impulsado por el oportunismo de Bailey y la pegada de Watkins.
Hasta catorce remates sin gol del Arsenal en la primera parte. Apenas cuatro en la segunda. Jugó al ritmo que marca la calidad de Odegaard, con la potencia de Saka en el costado derecho como principal factor desequilibrante. Sin encontrar el gol Havertz pese a su buena conexión con Trossard. El 'Dibu' exhibió firmeza ante un zurdazo del alemán y en un mano a mano entre ambos.
En esos momentos en los que el ritmo del Arsenal se puede llevar por delante a cualquier rival, Diego Carlos no se cansó de cortar acciones de peligro. A otras les faltó acierto en el remate. En un testarazo libre de marca en el segundo palo de Gabriel Jesus, un disparo al lateral de la red de Saka y un paradón milagroso del 'Dibu', lanzándose con todo y sacando el balón con los pies, ante el remate a placer de Trossard en boca de gol.
Tuvo capacidad de sufrimiento el Aston Villa, superó la tempestad sin daños que lamentar y, cómodo en su papel de juez de la liga inglesa, ya avisó de que tenía pólvora arriba. Un mal desplazamiento de Gabriel, a la espalda de Zinchenko, dejó el balón a Watkins, que estrelló su disparo potente desde la frontal en un palo.
No encontró mejor forma en la reanudación de bajar las revoluciones al Arsenal que arrebatándole el balón y a la intensidad sumó el equipo de Emery un paso firme al frente para hacerse merecedor del triunfo. No sorprendió, pese a llegar en la recta final, porque lo fue labrando. Con un disparo alto de Watkins o el serio aviso de arriba de un futbolista como Tielemans que liga su nombre a grandes goles.
La rompió, tras un despiste de Zinchenko en el inicio de jugada en el costado izquierdo, y el balón se estrelló en el larguero primero y en un poste después. El Arsenal se tambaleaba. En cuanto Odegaard estuvo tapado, le faltó fútbol y le sobró ansiedad para precipitarse en su juego veloz. Apenas un intento de Gabriel Jesús antes de que la misma cara de incredulidad se repitiese en los miles de rostros de la grada del Emirates.
Con base en tiros de esquina había avisado el Aston Villa hasta que con su insistencia llegó un centro desde la izquierda de Digne que no alcanzó por milímetros Pau Torres en el primer palo, pero arrastró a una defensa pasiva para que en el segundo marcase a placer Bailey con la derecha.
Sin tiempo para digerir la pérdida del liderato, quedar a dos puntos del City y dar un paso atrás en sus ilusiones por el título, llegó un segundo golpe para el Arsenal castigando un balón perdido de Jorginho.
Watkins, tras un pase en largo, lo hizo magistral. Encaró a su defensor y picó el balón ante Raya para dinamitar la pelea por la Premier League en un domingo de locura.