<
>

A 30 años de la primera locura: el Newell's campeón de Bielsa

Marcelo Bielsa es uno de los grandes entrenadores argentinos. Y reconocido a nivel mundial por su personalidad, su estilo de juego, su impronta…

Podría decirse que todo lo que después se vio en la carrera del DT rosarino comenzó a gestarse en el Newell’s campeón de la temporada 1990/1991. El 9 de julio de 1991, hace 30 años, la Lepra le ganaba a Boca en La Bombonera la definición por penales del Campeonato de Primera División y el Loco festejaba su primer título.

La campaña de Newell’s puede dividirse en dos partes. En ese torneo la AFA había decidido jugar dos competencias separadas: el Apertura, que ganó Newell’s y el Clausura, que ganó Boca. El campeón de la temporada surgiría de dos partidos, ida y vuelta, que ambos ganadores jugarían entre sí.

Newell’s había triunfado en el Apertura con una enorme campaña: sacó 28 puntos, con 11 triunfos, seis empates y dos derrotas (en esos tiempos se daban dos puntos por partido ganado). Sumó 30 goles a favor, la delantera más efectiva, y 13 en contra. Segundo había quedado River, con 26, que había perdido de local con Vélez 2 a 1 en la última fecha.

El plantel estaba integrado en buena parte por jugadores surgidos de las Inferiores del club, y la formación salía muchas veces de memoria. En el último partido del Apertura, que empató 1 a 1 con San Lorenzo en cancha de Ferro, formó con: Norberto Scoponi; Julio Saldaña, Fernando Gamboa, Mauricio Pochettino y Eduardo Berizzo; Darío Franco, Juan Manuel Llop y Gerardo Martino; Julio Zamora, Cristian Ruffini y Ariel Boldrini.

Ese equipo que se coronó en el Apertura tenía una base sólida, armada por José Yudica, DT que con Newell’s había salido campeón en 1987/1988. El Loco potenció ese equipo, que con una gran fortaleza física contaba con Jorge Castelli como preparador físico.

Faltaba la segunda parte del torneo, el Clausura. Allí fue Boca el que se consolidó como un gran equipo de la mano del Maestro Tabárez, con Latorre y Batistuta como piezas determinantes. El xeneize salió primero, y Newell’s terminó en el puesto octavo con 20 puntos, a 12 del líder.

En el Clausura la Lepra ganó seis partidos, empató ocho y perdió cinco, con 21 goles a favor y 14 en contra. Una campaña mediocre, que daba alarmas de cara a lo que sería la definición por el título.

Claro, tanto Boca como Newell’s, ganadores del Apertura y el Clausura, habían festejado como un campeonato esos logros, pero para la AFA el campeón debía surgir del encuentro final.

Boca llegaba mejor, porque acababa de ganar el Apertura y venía en un buen momento futbolístico, mientras que Newell’s llegaba con una merma en su rendimiento: habían pasado varios meses desde la conquista del Clausura. “No estábamos jugando bien, pero igual me tenía mucha fe”, reconocía Bielsa tras la final ganada.

Si bien en el segundo torneo arrancó ganando los dos primeros partidos, ante Platense y Argentinos, fue perdiendo terreno en las siguientes jornadas. Queda igual, para el recuerdo, la goleada 4 a 0 ante Central, el clásico rosarino, partido que terminó suspendido por incidentes en las tribunas. Boca, en tanto, le había ganado en la fecha 17 por 1 a 0 con gol de Hrabina.

Así, llegó el momento de la final, a la que Boca llegó con tres puntos más en el acumulado de los dos torneos (51 a 48). Pero estaba claro que había mucha paridad entre ambos equipos.

Las finales lo confirmaron: en Rosario, Newell’s ganó 1 a 0 con gol de Berizzo. Boca se impuso 1 a 0 en La Bombonera, con tanto de Gerardo Reinoso. Y todo fue a los penales.

Hay que recordar que la AFA había decidido convocar a dos jugadores de cada plantel para la Copa América que se disputaba en ese momento.

Así, Boca perdió a Latorre y Batistuta, el alma del equipo de mitad de cancha hacia adelante. Tabárez pudo reemplazarlos con las incorporaciones de Gerardo Reinoso y el brasileño Renato Gaucho.

Bielsa decidió apostar, como lo venía haciendo, a las Inferiores. Y no contrató refuerzos por Fernando Gamboa y Darío Franco, también dos jugadores fundamentales para el DT, quienes fueron llamados a la albiceleste por el Coco Basile.

En el partido de vuelta, Newell’s formó con: Norberto Scoponi; Fabian Garfagnoli, Mauricio Pochettino, Eduardo Berizzo y Miguel Angel Fullana, Gerardo Martino, Juan Manuel Llop, Julio Saldaña y Julio Zamora, Ariel Cozzoni y Cristian Domizi.

Tras el triunfo de Boca en La Bombonera llegó el momento de la definición desde el punto del penal, luego de 30 minutos de un sufrido alargue.

En los penales un enorme Scoponi (atajó los remates de Alfredo Graciani y Claudio Rodríguez), más al remate desviado de Walter Pico, le dieron un título histórico a Newell’s.

Fue el comienzo de la carrera de Bielsa como entrenador, y el surgimiento de jugadores que luego serían grandes referentes como futbolistas y entrenadores: Pochettino, Berrizo, Martino, Llop… Sin dudas el primer título de Bielsa fue un logro histórico, el inicio de un camino que dejó mucho para recordar.