MÉXICO -- Elías Hernández corría solo por las canchas de La Noria en 2019, su equipo peleaba por clasificar a la Liguilla y el atacante trabajaba en solitario para recuperarse de las lesiones que lo molestaron casi todo el año. En los primeros días del 2020 se sentó frente a la prensa y dijo: “estoy de vuelta”.
Es cierto. El mediocampista es el mejor futbolista del Cruz Azul en lo que va del Clausura 2020, el más desequilibrante de la Liga MX y el comodín de Robert Dante Siboldi.
Dice el técnico uruguayo que a Elías lo ocupó hasta en tres posiciones en el juego contra Toluca y así lo ha hecho durante todo el torneo, debido a que el futbolista de 31 años es el jugador más peligroso del certamen con 13 mano a manos (1 vs.1) ganados en la ofensiva, nadie es mejor que él en las primeras cuatro jornadas.
El impulso del futbolista surgido de Monarcas Morelia ha rescatado a Siboldi y a La Máquina, porque el atacante lleva tres goles y un pase para gol, dos de esas anotaciones se convirtieron en los cuatro puntos que lleva hasta ahora el equipo Celeste. El Patrullero está al mando del ataque cementero.
“Cuando tiene un jugador con técnica, con capacidad y buena percepción de juego, te hace todo más fácil, porque puedes contrarrestar al rival, atacar y nulificar”, aceptó el técnico uruguayo.
Sin importar que no es centro delantero, es el jugador que más remata a portería de los cementeros y el tercero con más intentos al arco de la Liga MX, según cifras del Centro de Innovación Tecnológica de la Liga MX. Uno de sus disparos, contra el Toluca, se convirtió en el rebote que Santiago Giménez convirtió en gol y otro pegó en el poste, oportunidad que hubiera acabado con los escarlatas el pasado fin de semana.
Elías Hernández lleva tres anotaciones y es el goleador de La Máquina Celeste, se ha convertido en el comodín del equipo de Robert Dante Siboldi. Defiende a sus compañeros, “no le achacamos ese gol a Corona”, y a sus 31 años está de regreso en el momento que más lo necesita su equipo.