Desde el pasado mes de diciembre, en cuanto la Selección Mexicana supo qué rivales tendría en el Mundial de Rusia, comenzó la estructuración del ‘plan maestro’ para encarar a cada adversario y llegar “con la mejor preparación posible”, de acuerdo a Juan Carlos Osorio.
El colombiano, junto a su cuerpo técnico y desde luego, la dirección de selecciones nacionales, creó un plan de trabajo inédito en una Selección Mexicana que disputaría un Mundial. En el Tri se aplicó el concepto ‘para lograr cosas diferentes, hay que hacer cosas diferentes’ y en eso consistió la labor durante seis meses antes de llegar a Rusia 2018.
En este lapso, el cuerpo técnico del Tri se encargó de estudiar a detalle a cada uno de los rivales que se medirían en la Fase de Grupos y hasta a los posibles cruces en Octavos de Final, aunque la prioridad siempre fueron Alemania, Corea del Sur y Suecia.
Para ello, el cuerpo técnico realizó viajes para dar seguimiento presencial a los rivales en partidos tanto de selecciones como de los mismos clubes, además de que también se apoyaron en el departamento de video y estadística que tiene el combinado nacional, comandado por Irving Mendoza.
“Desde el sorteo todos estudiaron todos los partidos entre sus auxiliares (de Osorio) y (Juan Carlos) Ortega; luego todos en video, editados y por jugador, por línea y más partidos de Löw para encontrar tendencias”, compartió a ESPN Digital Dennis te Kloese, director de selecciones nacionales, acerca del trabajo realizado para planear este Mundial.
Los datos obtenidos fueron analizados a detalle y la información se subía a una plataforma digital llamada SISEL, en la que se incluían videos editados de los jugadores rivales, los movimientos que tienen, las tendencias, su manera de jugar y cualquier tipo de detalle que fuera necesario tomar en cuenta. Una vez que estaban en la plataforma, se la compartían a los seleccionados para que lo fueran estudiando.
“Es un análisis numérico y corresponde al video. Por ejemplo: ¿quién despeja mejor de nuestro rival en la portería? Tenemos que acompañarlo de un reporte estadístico, donde en los últimos 25 partidos, este jugador despeja hacia tal lado y despeja mejor de esta manera; normalmente vemos de cuatro a cinco partidos previos de nuestro rival para analizar quién juega, cómo juega y por dónde juega. Después, las funciones que tienen cada uno de ellos e interpretar sobre una muestra a quién nos vamos a enfrentar”, explicó Irving Mendoza a una entrevista que dio a conocer la Selección Mexicana a través de su cuenta de Twitter para dar a conocer cómo se trabaja en el departamento de video y estadística.
Osorio lo tenía todo perfectamente medido. A los jugadores rivales se les estudió en cada movimiento, así como las tendencias de los entrenadores, sus parados tácticos, sus tipos de cambios y cómo funcionan en situaciones como cuando ganan o pierden partidos. Fue una labor de día y noche durante meses.
“Habíamos diseñado un plan desde hacía aproximadamente seis meses. Con las lesiones tuvimos que cambiar a algunos protagonistas en ciertos partidos, pero el plan lo teníamos: era jugar con futbolistas rápidos en las bandas”, explicó el entrenador colombiano minutos después de que finalizara el partido contra Alemania en el debut del Tri del Mundial.
El plan estuvo perfectamente estructurado. Antes de jugar contra Alemania, los jugadores mexicanos ya sabían todo sobre sus rivales en Moscú. Lo que restaba era ejecutar al pie de la letra. No había casualidades ni en la alineación ni en los cambios, mismos que podían variar dependiendo el resultado que se tuviera en determinado minuto del cotejo.
“Lo estuvimos ensayando toda la semana. Cambiamos a línea de cinco. (Osorio) Estuvo trabajando posibles escenarios; yendo abajo como plantearíamos el partido, yendo arriba, cuál sería el escenario ideal los últimos minutos. Creo que ahí el míster hizo un gran trabajo metiendo línea de cinco y tres volantes de recuperación”, compartió Carlos Salcedo sobre cómo se preparó el Tri para enfrentar a los vigentes campeones del mundo.
Con Corea del Sur y Suecia se hizo lo mismo, aunque primero hubo más concentración sobre Alemania al ser el primer adversario en el Mundial. Juan Carlos Ortega, coordinador de selecciones menores, igualmente sirvió de apoyo al Tri absoluto en cuanto al estudio de los rivales, principalmente con los surcoreanos, a quienes se enfrentó hace dos años en los Juegos Olímpicos y ya tenían a Shin Tae-Yong como entrenador desde las juveniles.
Después de la victoria sobre Alemania, solamente hubo algunos festejos el domingo, pero no hubo mucho tiempo para eso, como sí poner en marcha el plan sobre Corea del Sur y Osorio dejó entrever algunas de sus ideas este miércoles:
“Contra Alemania sabíamos que (Joshua) Kimmich y (Marvin) Plattenhardt iban a venir a atacar constantemente y con Corea pensamos que no, porque ya vieron lo que hicieron (Hirving) Lozano y Miguel (Layún) y no van a insertar a sus laterales al ataque. Esto me dice que necesitamos más jugadores habilidosos que rápidos”, sostuvo en entrevista con ESPN.
Al azar no quedó nada para el Tri. Una muestra más fue que en los partidos previos, el seleccionador apostó por utilizar alineaciones completamente distintas a las que presentaría ya en el certamen. Fue algo complicado por todo lo que generó por los resultados y la opinión pública.
“Fue muy difícil soportar tantas críticas y aguantar tanto, sabiendo que ese no era el once, ni contra Gales, Escocia o Dinamarca y que en las declaraciones iba a ser muy preciso y no dar tantas explicaciones porque nos imaginamos que ellos nos iban a estudiar tanto como nosotros a ellos y de no ser así, mejor”, señaló el entrenador colombiano.
Un punto crucial es que los jugadores siempre han creído en Juan Carlos Osorio y en sus métodos de trabajo. No fue en vano que le dedicaran la victoria del domingo y han mostrado compromiso por escribir su propia historia, impulsados de igual manera por todo el trabajo psicológico de Imanol Ibarrondo, coach del Tri, alguien crucial en toda esta estructura.
“Le dedicamos esta victoria a él, porque se lo merece más que a nadie. Ha trabajado, ha sufrido mucho y nadie creía en él más que nosotros, pero planeó esto muy bien”, agradeció Rafael Márquez el pasado domingo después de la victoria sobre Alemania.
La Selección Mexicana sueña en grande y confían en que el plan creado rendirá frutos. Lo que resta es ejecutarlo y adaptarse a las circunstancias que en cada partido se puedan presentar.