Alianza Lima lo volvió a hacer. El equipo de Carlos Bustos sacó adelante otro partido complicado, esta vez contra Melgar, y sigue derecho hacia el título de la Fase 2.
En un juego cerrado, cuesta arriba por la expulsión de Valenzuela, Alianza Lima sacó rédito de la pegada, una de sus mayores virtudes y que les ha valido para decidir partidos. Y es que el líder de la Fase 2 cuenta con las individualidades ofensivas más determinantes de la Liga 1 y si no aparecen Barcos ni Farfán, lo hace Jairo Concha con un bombazo desde fuera del área, el único remate blanquiazul al arco en el duelo.
Otra clave fue la fortaleza defensiva de un Alianza Lima que ha logrado mantener su valla invicta en 7 de los 12 juegos de la Fase 2. Melgar lo intentó de todas formas, pero Míguez supo liderar a su defensa, imponerse en los centros laterales e imponer su agresividad cuando el rival quiso penetrar por dentro. Ante una defensa tan replegada, Quevedo entendió que la solución estaba en el remate de media distancia y buscó el empate insistentemente, pero no tuvo la efectividad que sí tuvo Concha.
No se puede hablar del triunfo de Alianza Lima sin destacar la sapiencia de Carlos Bustos. Ante las ausencias obligadas de Aldair Rodríguez y Benítez por lesión, el argentino acertó con Valenzuela y Aguirre. El volante le dio mayor mayor equilibrio al mediocampo cuando Melgar dominaba las acciones mientras el veterano delantero cambió la dinámica del partido a partir de su energía, velocidad y desmarques que activaron a Concha. Tras el 1-0, Bustos supo oxigenar a su equipo con el ingreso de Moyano y Farfán y Arley Rodríguez, dos amenazas que le dieron jerarquía al líder de la Fase 2 y obligaron al conjunto arequipeño a tener mayores recaudos defensivos.