Kevin Méndez, jugador de Defensor Sporting, habló con ESPN.com.uy sobre su etapa en el fútbol de Ucrania, donde jugó en el Karpaty-Lviv, llegando al plantel para la temporada 2018/2019.
Tras haber llegado a Europa desde Peñarol para jugar en la Roma, Méndez estuvo a préstamo en Perugia y Viterbese de ese país y en Lausanne de Suiza, antes de recalar en el fútbol ucraniano. Según contó el jugador, su etapa en ese país no fue la más placentera. Tuvo una fractura de hombro que le tuvo casi seis meses sin jugar, pero más allá de eso, el jugador nunca se halló a gusto.
“Una cultura, una forma de pensar y un fútbol totalmente diferente. Los sudamericanos estamos acostumbrados a otro tipo de vida. Me costó un montón acostumbrarme a Ucrania, un país totalmente cerrado, con gente cerrada”, contó Méndez, de 24 años.
El atacante dijo que nunca llegó a adaptarse del todo a la vida en el expaís soviético y trazó diferencias con el momento en que llegó a Italia. “En Italia que me costó adaptarme, pero llegó un momento en el que estaba cómodo, hablaba el idioma, me llevaba bien con la gente, no tenía problemas; viven un poco más como nosotros, salvando las diferencias entre Europa y Sudamérica, es gente más abierta. En ucrania nunca dije estoy realmente adaptado, estoy a gusto o conforme. Siempre era un problema en la calle, en la vida, con el club, o con la gente del club. Nunca terminaba de estar tranquilo”, contó.
Méndez dijo que sus compañeros y el personal del club eran “tipos muy cerrados, muy complicados para relacionarse”. “A veces te ponías a analizar y nunca te habías sentado a hablar con algún compañero, nunca se abría a intentar comunicarse, por más que no hablaran el mismo idioma, así se vuelve totalmente difícil”, agregó.
En oposición, dijo que en los vestuarios italianos, a pesar de que tampoco hablaban español, siempre buscaron integrarlo al grupo. “Se intentaban comunicar aunque no hablaran el idioma, te daban una mano. En Ucrania no tenía trato, no tenía relacionamiento. Los sudamericanos por un lado y los ucranianos por otro. Fueron todas situaciones así que llevan a que no tengas una conexión fuerte con los compañeros”, añadió el actual jugador de Defensor Sporting.
Su etapa en el Karpaty Lviv se cerró con 15 partidos jugados entre todas las competiciones, sin goles y con una asistencia.