Las circunstancias en torno a WrestleMania 36 son muy inusuales. Debido a las restricciones con respecto a las multitudes por la pandemia de coronavirus, el evento se trasladó del Estadio Raymond James de Tampa Bay al Centro de Rendimiento de WWE en Orlando, Florida. WWE también decidió dividir el evento en dos noches, 4 y 5 de abril. No habrá fanáticos presentes en ninguna de las noches, solo personal esencial.
Becky Lynch encabezó WrestleMania 35 en el estadio MetLife, derrotando a Ronda Rousey y Charlotte Flair para ganar los dos campeonatos femeninos ante una multitud de más de 82,000 personas.
Cuando regrese a la acción en el evento del próximo fin de semana y defienda el campeonato femenino de WWE Raw contra Shayna Baszler, la escena será drásticamente diferente, pero Lynch dice que ha estado en esta situación anteriormente.
"Vengo del circuito independiente, así que estoy acostumbrada a luchar frente a nadie", dijo Lynch a Ariel Helwani de ESPN. "Luché en algún lugar de Kilkenny en Irlanda, frente a siete personas”.
"Y casi creo que podría ser peor porque puedes escuchar lo que dicen. Es posible que escuches algunos comentarios irrespetuosos de vez en cuando".
Lynch, quien cree que su lucha probablemente sea en la primera noche de la transmisión de WrestleMania, se ha convertido en una de las caras más reconocibles de la industria como uno de los artistas – hombres o mujeres – más populares, y gran parte de su personalidad depende del apoyo de quienes la rodean.
"Soy alguien que se ha alimentado tanto de la energía de la multitud, y ha sido mi conexión con la multitud lo que me ha llevado a donde estoy y sé que sin esas personas no estaría haciendo lo que estoy haciendo”.
"Es un cambio diferente en tu cerebro", continuó Lynch. "Como si tuvieras que usar una parte diferente de ti porque sabes que en el otro extremo hay millones de personas mirando. Así que tienes que conectarte a ellos de manera diferente".
"No vas a obtener la misma gratificación que recibes frente a una audiencia que te dejan saber qué tan bien lo estás haciendo, qué tan bien no lo estás haciendo, y te están respondiendo constantemente. Hay menos autogratificación, pero más concentración de los matices y cuál es tu mensaje. ¿Por qué quiero que la gente se preocupe sobre lo que voy a hacerle a Shayna Baszler?”.
Además de eliminar a los fanáticos de la ecuación, WWE ha hecho todo lo posible para tratar de minimizar el riesgo de propagar el coronavirus mientras filmó sus shows en las últimas semanas en el WWE Performance Center, según Lynch.
"No tenía ninguna preocupación por mí misma", dijo Lynch después de que se le preguntó sobre la decisión de Roman Reigns de retirarse de la cartelera. "Nos hemos basado en un sistema muy higiénico y realmente limitamos la cantidad de personas que están allí. Creo que lo único de lo que soy muy consciente es que ahora estamos de regreso, y cuando volvamos, que simplemente nos aislemos durante un par de semanas para asegurarnos de que no tengamos ningún síntoma antes de salir al mundo nuevamente".
El personal también ha sido limitado en Orlando, muy diferente de una operación típica de WrestleMania.
"Están escalonando todo. Si no tienes una razón para estar allí, sal de allí. No estés allí. Si tienes una lucha o un segmento, estás allí con una cantidad mínima de equipo para montarlo, luego, cuando entras te toman la temperatura, se completa el cuestionario y los médicos están allí para recibirte tan pronto como entras en el edificio".
WWE ha visto este WrestleMania como una forma de proporcionar una salida para aquellos en casa que buscan nuevo entretenimiento. Para todos los luchadores en la cartelera, está claro que entienden el desafío y esperan brindar un momento alejado de las noticias relacionadas con el virus a través de todo el mundo.
"Necesitan más entretenimiento", dijo Lynch. "Necesitan un poco de distracción durante unas horas o unos minutos, sea lo que sea".