Descomunal. Así se puede describir el arranque de David Alonso en el Gran Premio de Francia, quinta fecha del Mundial de Moto3. El colombiano parece haber dejado rápidamente atrás el error en la carrera de Jerez de la Frontera, la cita anterior, en la que la tempranera caída cuando marchaba al frente lo dejó en la dura tarea de remontar desde el fondo y firmar un 11º puesto final que le dejó gusto a poco después del dominio que había mostrado en la pista andaluza.
En el circuito Bugatti de la Sarthe, en Le Mans, el corredor del Aspar Team había dominado la práctica libre que abrió el fin de semana, y con un extra: bajó el rércord del trazado. Pero eso no fue suficiente para el hijo de madre colombiana, de Bucaramanga: en el primer entrenamiento de los que se combinan para otorgar el pase directo a Q2, Alonso volvió a quedarse con el primer lugar y bajó su propio récord establecido un par de horas antes.
Alonso marcó 1m40s470 y le sacó una abismal distancia de 480 milésimas a Joel Esteban, su escolta y compañero de equipo en Aspar. Para tener una idea de la diferencia que logró el colombiano, de Estaban (el segundo) a Jacob Roulstone (el décimo) hay 503 milésimas. Lo del colombiano es brutal.
"Estamos haciendo un gran trabajo, pero hasta el domingo no se reparten los puntos. El primer día ha ido bien y hemos mejorado algunas cosas respecto al año pasado. Siempre busco dónde mejorar y aunque ahora haya una gran diferencia con el resto, luego siempre se acaban acercando. Aquí el neumático parece que aguanta bien y creo que se puede hacer un buen tiempo con gomas usadas. Mañana la pista estará mejor y quizá aún se puede progresar más", dijo Alonso al cerrar la primera jornada francesa.
Este sábado se disputará la segunda sesión de entrenamientos, resultado que se combinará con los de la primera para tener a los diez que pasarán directo a Q2. Alonso es número puesto para pasar entre la decena.