OWING MILLS -- El coordinador defensivo Dean Pees tuvo un choque con la realidad cuando habló con el entrenador en jefe John Harbaugh sobre la lista de profundidad de los Baltimore Ravens esta temporada baja: sólo quedan dos titulares de la defensiva que ayudó a los Ravens a ganar el Super Bowl hace 17 meses.
"Cuando tienes cambios [en la plantilla], siempre hay un poco de tiempo para que los chicos se desarrollen", declaró Pees, quien sólo cuenta con Terrell Suggs y Haloti Ngata de los defensivos titulares en el campeonato. "Pero también, al igual que todos los equipos, no puedes mantener a los mismos jugadores por siempre".
Los cambios a menudo llevan a un periodo de transición, en especial cuando estás lidiando con la pérdida de dos futuros miembros del Salón de la Fama en Ray Lewis y Ed Reed. Pero el cambio era una necesidad para los Ravens. Por primera vez en 15 años, los Ravens tuvieron temporadas consecutivas sin contar con una defensiva del top-10. El grupo alguna vez temido de pronto se volvió mortal.
Los Ravens necesitaban rejuvenecer, volverse más rápidos y mejorar. Una fuerte inversión en la defensiva --sus tres selecciones más altas en los drafts del 2013 y 2014 llegaron de ese lado del balón-- ha aportado una gran inyección de talento. Cuatro de esos jugadores (el profundo fuerte Matt Elam, el tackle nariz Brandon Williams, el apoyador C.J. Mosley y el profundo libre Terrence Brooks) tienen la oportunidad de ser titulares esta temporada.
Los Ravens están mezclando su juventud con dos de los mejores cazamariscales de la liga en Suggs y Elvis Dumervil, una pareja de esquineros emergentes en Lardarius Webb y Jimmy Smith y un ancla por el centro con Ngata.
"La expectativa para nuestra defensiva es volver al top-5, como mínimo", sentenció Harbaugh. "Siempre ha sido de esa forma y siempre lo será".
Mucho antes de que los Seattle Seahawks ganaran un Super Bowl con su defensiva, los Ravens lo hicieron en el año 2000. Después, del 2003 al 2011, los Ravens contaron con una defensiva del top-10. Defensivas dominantes se volvió un sinónimo de Baltimore.
Esa racha terminó en el 2012, cuando la defensiva de los Ravens terminó en la posición N° 17 de la liga en yardas permitidas y N° 12 en puntos admitidos. La defensiva jugó un papel importante para derrotar a los San Francisco 49ers en el Super Bowl, en especial con su detención al final en la zona roja, sin embargo eso no borró el hecho de que los Ravens permitieran la segunda mayor cantidad de yardas en la historia de la franquicia ese año.
Las fallas continuaron la temporada pasada, cuando los Ravens se ubicaron en la posición N° 12 a la defensiva. De no haber sido porque la ofensiva terminó cerca del fondo de la liga y Joe Flacco lanzó la mayor cantidad de intercepciones en su carrera, 22, habrían más quejas sobre la defensiva que permitió la mayor cantidad de puntos en el último cuarto en la historia del equipo.
"El año pasado, por momentos, mostramos destellos de ser una buena defensiva, pero después tuvimos problemas", expresó el ala defensiva Chris Canty. "Cometimos errores, cometimos errores mentales y esas son las cosas que no pueden suceder si quieres tener éxito en la NFL. Tenemos que asegurarnos que estamos en la cima de nuestro juego en cada jugada".
Algunos pueden sugerir que los Ravens cometieron errores en el draft de este año. Con base en la manera en la que la ofensiva tuvo problemas el año pasado, era más que una prioridad sumar a un tackle derecho, un receptor abierto o un corredor en la parte alta del draft.
Luego de que los Ravens eligieran a tres jugadores defensivos con sus primeras tres selecciones, el propietario Steve Bisciotti, de acuerdo a algunos reportes, se volteó hacia el nuevo coordinador ofensivo Gary Kubiak y le dijo: "Eso es lo que hacemos aquí. Te pedimos tu opinión, pero después Ozzie [Newsome, gerente general] siempre toma jugadores defensivos".
Aunque algunos lamentan que los Ravens no hayan atendido su ofensiva en el draft, el enfoque debe estar en el talento que adquirieron. Tienen a un futuro jugador de Pro Bowl en Mosley, un eventual reemplazo para Ngata en Timmy Jernigan y un profundo veloz en Brooks.
"Una defensiva joven es algo bueno. Estoy emocionado por ello", indicó Harbaugh. "Cuando ganamos el Super Bowl, definitivamente no teníamos la defensiva más rápida de la NFL pero teníamos mucha inteligencia y contábamos con jugadores que hacían las jugadas cuando más importaba. Lo que nos falta es experiencia, vamos a tener que compensarla con vigor y velocidad.
Cuando los Ravens ganaron el Super Bowl, el promedio de edad de la defensiva titular era de 29.5 años. Este año los titulares proyectados en la defensiva son aproximadamente tres años más jóvenes.
Ahora tienen que demostrar que son mejores.
"Podemos ser realmente buenos", señaló Dumervil. "Creo que tenemos la velocidad y el atleticismo. Somos muy versátiles. Sólo tenemos que seguir trabajando, el cielo es el límite".