La reciente contratación de Ettore Messina como asistente de Gregg Popovich en San Antonio Spurs ha unido a las dos personas que más han influido en la carrera de Manu Ginóbili. Aparte de la semilla que padre y hermanos plantaron en el jugador argentino, los dos coaches fueron los encargados de moldear al escolta en momentos clave de su vida deportiva.
"Creo que he tenido dos maestros en mi carrera que cambiaron en mí algo. Uno fue Messina, en Italia, y el otro, Pop al momento de llegar acá", señaló Ginóbili a ESPNDeportes.com durante la celebración de las Finales que le convertirían en vencedor de su cuarto anillo de la NBA.
Y ahora, como caídos del cielo, los tendrá a los dos juntos mientras afronta su último año de contrato con los Spurs. A Messina, el artífice de su madurez y la transformación de su mentalidad en ganadora cuando le dirigió en el Virtus Bolonia desde 2000 a 2002; y Pop, el encargado de darle la confianza necesaria para elevarlo a campeón sin paliativos. Uno comenzó un trabajo de moldeado que el otro terminó; los dos le dieron la posibilidad de ganar títulos.
Siendo pupilo de Messina, Manu venció una Euroliga, una Liga y una Copa de Italia en 2001 (donde se proclamó Jugador Más Valioso de la final continental y de la temporada liguera); otra Copa y el galardón a JMV de la liga por segundo año al hilo en 2002. Eran tiempos en los que los Spurs se habían fijado en él, le habían elegido de manera sorpresiva en el puesto 57 del Draft de 1999 y habían optado por esperar a que creciera en Europa antes de dar el salto a la NBA.
"En Italia me transformé en un jugador de equipo, me empecé a sentir ganador, determinante y mi cabeza cambió. Pasé de ser el chico talentoso que hacía las cosas talentosas o que podía hacer muchos puntos, a ser un buen jugador", afirmó el pasado mes de junio.
El internacional argentino se marchó de Italia con la cabeza alta y no la ha bajado desde entonces. Cuando llegó a San Antonio, Pop se convirtió en su guía y le hizo evolucionar táctica y personalmente. El primer año lograron juntos el primer anillo de los cuatro que Ginóbili ha conseguido, y de ahí en adelante.
"Di un salto más de calidad y la experiencia que me dio jugar en un equipo como éste, con compañeros como estos, con un técnico como Pop. No sólo dentro del campo sino fuera, es un guía muy importante. Así que más allá de mi padre, que me llevó a la cancha por primera vez, ellos fueron los que me provocaron las diferencias más grandes", señaló sobre sus dos maestros.
La vida ha querido que Messina se una a uno de los proyectos más interesantes de la NBA. Lo hace 12 años después de presenciar cómo la joven promesa que una vez tuvo a su recaudo cruzó el Atlántico para hacer las Américas.
El italiano llega a los Spurs después de dos años en el CSKA de Moscú, donde vivió su segunda etapa. Anteriormente, Messina fue consultor de Los Ángeles Lakers durante la campaña 2011/12, justo después de llevar al CSKA de Moscú a ganar dos Euroligas (2006 y 2008) y cuatro SuperLigas de la liga Rusa consecutivas (2006 a 2009).
Al nuevo asistente de los Spurs le sobran credenciales y el propio Popovich le guardó pleitesía cuando este martes se confirmó su fichaje.
"Estoy muy honrado por tener a un individuo consumado que se una a nuestro programa. El coach Messina es un entrenador excepcional, un gran líder y alguien de quien todos podemos aprender mucho", afirmó cuando se certificó el fichaje.
Será así como los dos 'padres deportivos' de Ginóbili unirán sus fuerzas para lograr juntos lo que han conseguido por separado.