El peso welter del UFC pasa por un gran momento y el evento estelar de este sábado entre Vicente Luque y Belal Muhammad nos dará nuevo contendiente en Las Vegas.
Luque, de origen chileno y brasileño derrotó a Muhammad en el lejano UFC 205, en noviembre de 2016, hoy ambos están en largas rachas de victorias y en el top de las 170 libras. El ganador en esta ocasión podría levantar la mano para enfrentar a Kamaru Usman.
Pero Luque considera que la pelea será muy diferente, “Yo sé pelear mejor ahora con mis herramientas, con mi striking. Belal también ha mejorado, en su última pelea contra Stephen Thompson, que dominó con la lucha y el ground-n-pound y creo que usara eso conmigo”, dijo en entrevista con ESPN Deportes.
El peleador del Sanford MMA en el sur de la Florida no menosprecia a su oponente, sabe que será una de las peleas más importantes de su carrera, pero después de lo ocurrido el sábado, ya tiene a Khamzat Chimaev en la mira. “Por supuesto, ahora más que nunca, porque ahora está arriba en el ranking, todo el hype, de ese tipo que parece que va a ganar todo y le ganó a Durinho (Gilbert Burns), que es mi hermano”, explicó.
Vicente vio ganar a su compañero en una pelea muy cerrada y quiere vengar la derrota: “Fue una tremenda pelea, fue espectacular, no vi una decisión tan clara para Chimaev. Entiendo que era para cualquiera de los dos, aunque yo vi ganar a Gilbert. Antes todos pensaban que Khamzat era imbatible, ahora se ve que sangra, sufre y se cansa. Es como todos, tiene momentos difíciles en la pelea, creo que ya no es especial o diferente, ahora cambió la visión de todos sobre él”, considera.
Si sale con la victoria el sábado, Luque piensa que puede tener un acceso directo a la pela del campeonato ante Usman, su ex compañero, que recientemente volvió al gimnasio para trabajar con ellos: “Es normal para nosotros, somos amigos desde TUF 21, muchos años de amistad y entrenamos juntos, pero sabemos que un día vamos a pelear. Es diferente con Gilbert, con él nunca voy a pelear porque somos como hermanos”.
El ‘Asesino Silencioso’ se niega a cambiar su personalidad, siempre alegre y respetuoso de sus oponentes, aunque sabe que eso le hubiera facilitado un ascenso al estrellato, prefiere hablar en la jaula. Con 13 finalizaciones en la categoría, solo está detrás de Matt Brown en la historia del UF.
“Es mi estilo, yo soy muy agresivo, peleo con todo. No me gusta dejarlo para los jueces, uno nunca sabe lo que va a pasar, si gano por nocaut o sumisión eso está asegurado, nadie puede decir que no, esa mentalidad es la que le lleva a terminar con muchas peleas y ser peligroso para todos, yo creo que esto es lo que me hace diferente y debería pelear después por el título, porque sé que puedo poner al campeón en peligro”, explicó.
Luque y Muhammad serán protagonizan la cartelera de este sábado desde el UFC Apex de Las Vegas.