Brandon Moreno tiene cerca de una década como profesional de las artes marciales mixtas, pero apenas en junio de este año su vida cambió para siempre.
Tener el cinturón de peso mosca del UFC lo tiene en el foco de atención. Es el primer peleador nacido en México en conseguir un campeonato y a raíz de eso se multiplicó la atención de los medios, seguidores y hasta las autoridades que quieren aparecer en la foto.
En su más reciente visita a la ciudad de México, donde el presidente Andrés Manuel López Obrador lo recibió en el Palacio Nacional, Moreno tuvo oportunidad de conocer a uno de sus ídolos, su paisano Érik ‘Terrible’ Morales, y no dejó pasar la oportunidad.
Moreno tenía muchas preguntas para una leyenda de Tijuana que ya vivió toda esa experiencia. Del estrellato, el éxito y también todo lo que conlleva el final de una carrera.
“Nadie nos enseña cómo comportarnos en el éxito. Yo te recomiendo, ahora que ya eres el campeón mundial, ya tienes el respeto de la gente y de los peleadores. Pero ahora todos quieren arrancarte la cabeza, puedes ser muy bueno en todas las artes, pero no te confíes, porque viene más duro que al inicio. Defender es muy difícil porque todos tienen el hambre, esas ganas, es algo muy interno, es un factor muy determinante, tu siempre tienes que llegar hasta arriba”, le explicó el ‘Terrible’ al rey de las 125 libras del UFC.
Moreno ya pasó por todas las etapas en el octágono. Llegó con tres victorias en UFC que lo convirtieron en el gran prospecto de su categoría, pero luego perdió en su primera estelar, en la Arena Ciudad de México, y casi un año después sería cortado de la promoción tras perder con el brasileño Alexandre Pantoja en Chile.
El regreso de Moreno a UFC resultó emotivo. Desde que le dieron una nueva oportunidad, en septiembre de 2019, ha peleado seis veces sin conocer la derrota (4-0-2).
“Ahora, échale chingazos, no vayas a salir con que a chuchita la bolsearon, porque la gente está alucinando que seas el jefe de jefes ahí. Queremos un campeón para rato”, agregó el miembro del Salón de la Fama del Boxeo Internacional.
Morales le explicó que, a pesar de que vio su última pelea cuando destronó al brasileño Deiveson Figueiredo, le cuesta trabajo seguir el MMA, pues siente claustrofobia con las llaves y estrangulamientos propios del jiu-jitsu, a lo que Moreno responde entre risas: “Cuando te pegaste el tiro con Barrera, yo no vi claustrofobia”.
La charla siguió por el tema de su carrera. Brandon tiene 27 años y se siente en plenitud física, pero sabe que no será así siempre, que la decadencia de su cuerpo llegará algún día y Erik compartió su experiencia.
“Tienes que empezar a suplir cosas, el boxeo es de velocidad o técnica. Cuando yo era joven les paraba el golpe y ahí mismo contestaba, cuando llegué a los 30 ya no podía. Entonces lo que hacía era anticipar, revisaba el video y estudiaba, si el rival tiraba jab-jab-recto, veía el doble jab y me adelantaba al recto, pero no siempre sale la magia”.
El peleador del Entram Gym, clasificado número uno por ESPN en 125 libras, aseguró estar bien respaldado para el futuro. “Hay mucho camino que recorrer, pero estoy bien enfocado. Hasta ahora siento que lo he hecho bien, tengo todo para lograrlo, tengo que seguir con el trabajo duro, rodearme de las personas correctas y seguir haciendo lo que estoy haciendo y todo va a salir excelente”.
Morales le habló entontes de la faceta de entrenador que ahora vive, con su gran prospecto, el peso mediano Jaime Munguía, que lo ha ayudado a apreciar las cosas que él no podía cuando le tocaba concentrarse para pelear.
“La neta está bien emocionante, nosotros nunca valoramos cuanta gente nos ve, que emociones tienen y te contagia, se pone muy bonito. Jaime es un buen morro, es un buen boxeador, que entrena muy fuerte, le echa muchas ganas y estoy seguro de que va a ser un buen boxeador”, agregó Morales.
Luego de intercambiar elogios y autógrafos en un par de guantes. El “Terrible” aprovechó para recordarle que no se deje llevar por todo el ruido que lo acompaña hoy.
“¿Viste a Andy Ruiz? Se le olvidó, está bien bonito todo, la emoción, el campeón las cámaras y todo. Eso va a desaparecer si pierdes y si no te pones las pilas y haces lo que tienes que hacer”, sentenció.
Aunque ambos crecieron en Tijuana y Brandon llegó a entrenar boxeo en el gimnasio Zona Norte, de Morales, no llegaron a coincidir. Años después, Brandon se llevó grandes consejos y Erik la grata sorpresa de ver la conexión que tiene con el campeón de lar artes marciales mixtas.