Brandon Moreno fue local en el Honda Center, pero se encontró con una versión mejorada de Deiveson Figueiredo, que recuperó el cinturón de las 125 libras y le da vida a una rivalidad que no se había presentado en la historia de la división mosca.
En el combate del peso completo, Francis Ngannou y Criryl Gane recorrieron la distancia, pero la evolución de Ngannou, que incorporó la lucha a su juego le bastó para convertirse en el único campeón de la categoría máxima.
El peso mosca es el más joven del UFC y nunca había tenido una rivalidad como esta. Deiveson Figueiredo y Brandon Moreno entregaron otra gran pelea, mucho más similar a la primera vez que se enfrentaron en diciembre de 2020 que la noche en Glendale, cuando Moreno dominó.
Deiveson aprovechó el tiempo de trabajo con Henry Cejudo en Arizona y lució mucho mejor en la defensa del derribo, la condición física y, sobre todo, pudo mantener a Moreno a la distancia con patadas bajas evitando que pudiera entrar con la mano izquierda al cuerpo o la cabeza.
Fueron otros 25 minutos intensos, ambos trataron de cerrar los rounds con fuerza y convencer a los jueces. El intercambio fue brutal por momentos, pero el brasileño sacó la mejor parte en los ojos de los jueces.
Figueiredo ofreció la cuarta pelea en México y tiene sentido, depende de los planes de la promoción la fecha y lugar, pero la cuarta pelea es necesaria para definir al mejor en la categoría.
Francis Ngannou evoluciona y se ‘despide’
La pelea del peso completo dejó dos sorpresas mayúsculas. La habilidad de lucha de Francis Ngannou, que consiguió cuatro derribos sobre Ciryl Gane para quedarse con la victoria por decisión unánime y la segunda cuando confesó que tiene una lesión en la rodilla que pudo costarle la pelea
Ya mostró su gran poder en repetidas ocasiones, pero los últimos dos años lo han convertido en una amenaza en todas las áreas.
La mala noticia es el nulo avance en el tema contractual con el UFC y si requiere cirugía, parece que será la última vez que lo veremos en el octágono.
Ecuador tiene una nueva cara
Durante años la evolución de Chito Vera ha sido notable y ahora tiene compañía. A sus 22 años Michael Morales ya tiene marca de 13-0 y victorias consecutiva en el Contender Series y en su debut en UFC 270.
Lució sólido en su lucha y poderoso para las 170 libras ante un oponente como Trevin Giles que ha peleado hasta en peso semicompleto.
Gran noticia para sudamerica y un enorme camino por delante para el peleador del Entram Gym de Tijuana.
Faltó paciencia para Valdéz y Gómez Juárez
El arranque de la noche fue complicada para los peladores de Entram Gym, pues se llevaron un par de derrotas por finalización en el primer round.
Primero la argentina Silvana Gómez Juárez, que conectó con poder a Vanessa Demopoulos y en su afán de terminar la pelea fue al suelo para tratar de terminar con la oponente. La experta en juijitsu aprovechó la oportunidad y la metió en una barra de brazo.
Un caso similar fue el de Genaro Valdez, el mexicano debutó ante un peligroso Matt Frevola que sabía a que venía el finalizador del Entram Gym.
Los dos lanzaron bombas durante más de tres minutos, pero Valdez fue a la lona en repetidas ocasiones. Era un ritmo imposible de mantener más allá de un round.
Tanto la Silvana como Genaro están recién llegados a la promoción y con espacio para hacer ajustes en su siguiente combate.
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