NOS ACERCAMOS a una época del calendario en la cual los equipos tendrán que decidir qué modo asumirán: compradores, vendedores o mantenerse quietos.
Ahora, es la temporada de cambios en la NBA: el inicio de esta se adelantó cuando la fecha límite para hacer este tipo de negociaciones se movió, durante la campaña pasada, a la primera semana de febrero. Viendo que casi cada jugador en la liga es elegible a ser canjeado, se trata de una época en la cual los peores canjes, las malas decisiones y aquellos jugadores firmados sólo para convertirse en fichas de cambio son vistos con lupa.
No obstante, en vez de concentrarnos en los cambios del verano de 2018 que no están funcionando, revisemos las operaciones que sí dieron dividendos. Muy bien, también revisaremos algunos cambios que resultaron mal y otros que muestran signos preocupantes en un futuro.
Lo bueno
LeBron James, Los Angeles Lakers
Casi sin pensarlo. LeBron muestra ritmo para terminar con su temporada más prolífica en lo que a anotación se refiere en nueve años. Sus estadísticas de anotación han bajado ligeramente, comparadas con la anterior campaña y sus asistencias muestran cierto declive también; sin embargo, la vara de medición es alta porque 2017-18 fue una de las mejores temporadas de la carrera de James. Su impacto en los triunfos de los Lakers es profundo y sublime a la vez.
Paul George, Oklahoma City Thunder
Siempre es positivo cuando tu jugador a salario máximo se desempeña como uno. George tiene topes personales en sus promedios de puntos, rebotes, asistencias, robos y PER, todo esto mientras tiene su menor promedio de tiempo de juego desde su segunda temporada en la NBA. También es un colaborador fundamental dentro de una de las mejores defensivas de la liga.
¿Vieron que Jokic consiguió el mejor aumento salarial en la historia de la liga, pasando de ganar $1.4 millones a $25.4 millones? Jokic es uno de los elementos más raros: un gigante creador que a veces es demasiado generoso, afectando su propia causa. Jokic es número 1 entre todos los pívots en la métrica real plus-minus y lo ha sido, aunque ustedes no lo crean, durante tres años consecutivos.
Julius Randle, New Orleans Pelicans
La firma de Randle ha sido excelente para la excepción a nivel medio en Nueva Orleans, incorporando a un jugador que ha florecido mientras juega al lado de Anthony Davis. Desafortunadamente para los Pelicans, Randle ha tenido problemas a la defensiva y éste puede rescindir su contrato el próximo verano.
Randle ostenta 45 por ciento de enceste en triples y buen índice de rebotes. Probablemente nunca será un buen defensor, pero esta parece ser una contratación que aporta tremendo valor a Sacramento Kings, que lo firmó por tres años y $20 millones. Sin mencionar que los Kings se lo robaron a los 76ers Philadelphia cuando éste decidió rechazar una oferta de Filadelfia para conseguir más años y dinero en Sacramento.
Hace tres años, Harris estaba lesionado, fuera de la NBA y su futuro era de pronóstico difícil e incierto. Ahora tiene promedio de 13 puntos, tiene 47 por ciento de enceste en triples, dentro de un contrato por dos años y $16 millones.
Tuvo una fuerte temporada que pasó por debajo del radar como suplente de alta energía la pasada campaña. Su presencia fue tan discreta que los Clippers pudieron mantenerlo con un contrato por dos años y $12 millones. Y ha sido uno de los mejores jugadores de reserva de la NBA hasta ahora.
López está estirando la cancha de manera hermosa, dentro de una de las mejores ofensivas de la Liga con sueldo de apenas $3.4 millones esta temporada.
Derrick Rose, Minnesota Timberwolves
Rose nunca superó el 33 por ciento de encestes durante su carrera. Sin embargo, ahora encesta 47 por ciento. Con un contrato a salario mínimo, Rose está disfrutando de su mejor temporada desde que sufriera su primera lesión de rodilla.
Jeff Green, Washington Wizards
Green está teniendo la mejor temporada de su carrera en lo que anotación se refiere, ganando sueldo mínimo.
Jonas Jerebko, Golden State Warriors
Con un equipo disminuido a raíz de las lesiones, los Warriors han dependido fuertemente de Jerebko y éste ha cumplido una serie de roles. También está siendo remunerado con sueldo mínimo.
Lo malo
Además del relato agradable que constituye su regreso al terruño natal, esta operación parecía constituir un riesgo gigantesco desde el inicio. Parker es un débil defensor y su ofensiva no ha sido lo suficientemente óptima para compensarlo. Parker está teniendo la peor temporada de su carrera en la categoría de anotación. Perdió su empleo como titular, luego pasó lo mismo como suplente y ahora es ficha de cambios. Pensar que le pagaron $20 millones esta temporada.
Dwight Howard, Washington Wizards
Su firma fue un riesgo calculado desde el inicio. Los Wizards se convencieron de hacerlo tras haber visto ciertos destellos por su parte en Charlotte Hornets durante la campaña pasada. El por qué pagaron a Howard $5.3 millones dentro de un mercado limitado es cuestionable y haberle conferido una opción potestativa del jugador para la próxima temporada por $5.6 millones es algo increíble. Después de haberse sometido a una cirugía, su futuro dentro de la liga está en duda.
Carmelo Anthony, Houston Rockets
Fue sólo una firma a sueldo mínimo, pero Houston se dio cuenta muy rápidamente que se trataba de una mala idea. Su defensiva en los playoffs de la temporada pasada fue un ancla para el Thunder. Su porcentaje de enceste ha decaído al punto donde su valor se ubica por debajo del nivel de jugador de reemplazo. Por ello, los Rockets lo reemplazaron en cuestión de semanas.
Avery Bradley, LA Clippers
Bradley se lesionó durante la pasada temporada y se mostró como si alguien intentara jugar con molestias. Se sometió a una cirugía y los Clippers apostaron por una plena recuperación, dándole $12 millones en la presente campaña, con opción potestativa para el equipo para la próxima temporada con $2 millones garantizados. Su enceste ha sido terrible y se ubica cerca del sótano en real plus-minus. El entrenador Doc Rivers lo ha defendido, manteniéndole en el quinteto abridor.
Lo preocupante
Chris Paul, Houston Rockets
Cuando Paul se mantiene sano, sigue siendo uno de los mejores en la NBA dentro de su posición. Sin embargo, parece lesionarse muy frecuentemente y los informes de scouting indican movilidad reducida por su parte. Las lesiones parecen haberle afectado durante toda la temporada; sus cifras de disparos y anotación han caído cerca de los topes más bajos de su carrera. Parte de ello puede deberse a la carga de trabajo: Paul, de 33 años, está jugando su mayor promedio de minutos en cuatro años. Vale la pena preguntarse cómo podría verse su contrato a cuatro años y $160 millones a largo plazo.
Kevin Love, Cleveland Cavaliers
Los Cavaliers sumaron cuatro años y $120 millones al contrato de Love el pasado verano. Hubo buenas sensaciones cuando esto ocurrió, aunque ambas partes estaban aprovechándose mutuamente, de cierta forma. Los Cavaliers se aseguraron de proteger a su activo, dejando abierta la opción de canjearlo tan pronto como durante esta misma temporada. Love, quien ha sido propenso a las lesiones a lo largo de su carrera, consiguió ser remunerado lucrativamente mientras mostró su lealtad a una organización que no está acostumbrada a acciones de este tipo. Love está lesionado nuevamente, se sometió a su tercera cirugía en cuatro años y ahora está comprometido con los Cavaliers hasta que cumpla 34 años.
Luego de que las etapas iniciales de la carrera de Exum se vieran truncadas por lesiones en rodillas y hombros, Utah apostó por su recuperación cuando le extendió una oferta por tres años y $33 millones ($27 millones garantizados) durante el pasado verano. A pesar de ello, su enceste, que parecía mejorar, ha caído en un hoyo; además, su eficiencia ha caído por el precipicio en la presente campaña.