El primer jugador dominicano en el Salón de la Fama de Cooperstown se encuentra recuperándose en su hogar luego de haber sido ingresado en un centro de salud en su país
Juan Marichal ya está en su casa luego de que durante la tarde del pasado martes 12 de abril, tuviese que ser ingresado de emergencia en el Centro de Diagnósticos y Medicina Avanzada (CEDIMAT), después de haber sufrido una caída en su residencia en la República Dominicana, de acuerdo con múltiples reportes de medios dominicanos y a la confirmación del hecho por parte de su médico de cabecera y su yerno.
De acuerdo con Hubiel López, médico del exlanzador, el primer dominicano en llegar al Salón de la Fama de Cooperstown se habría golpeado la cabeza en la caída. Sin embargo, indicó que todos los estudios realizados hasta el momento apuntaban a que dicha caída no representaba ningún tipo de peligro para su salud, a pesar de que se le mantuvo bajo observación médica durante varias horas. Al llegar al centro de salud, se indicó que se le atendió en la unidad de cuidados intensivos, pero más tarde, durante el mismo martes, se procedió a trasladarlo a una habitación privada.
A la salida del “Monstruo de la Laguna Verde” del hospital, el doctor López señaló a los medios dominicanos que se mantendría una estricta vigilancia y seguimiento en su hogar, hasta que fuese necesario, con el fin de ver una recuperación total y satisfactoria del exjugador.
Marichal, quien recientemente habló sobre su contagio de COVID-19 y quien señalara que se sometió a un procedimiento médico a finales del año pasado, se encuentra próximo a cumplir los 85 años, por lo que la noticia llama poderosamente la atención de los amantes del béisbol dentro de la República Dominicana.
El legendario lanzador dominicano llegó al Salón de la Fama de Cooperstown en el año 1983, luego de una carrera de 16 temporadas en Grandes Ligas que inició en el año 1960. Acumuló 243 victorias con 142 derrotas en 471 partidos lanzados, donde trabajó por espacio de 3,507 entradas y obtuvo una efectividad de 2.89. Terminó su carrera de MLB con 2,303 ponches, 709 bases por bolas y 3,153 hits tolerados, lo que se convierte en un promedio de transferencias e imparables por entrada lanzada (WHIP) de 1.101.
Fue seleccionado en diez ocasiones para participar en el Juego de Estrellas de MLB, donde quedó como Jugador Más Valioso en una ocasión y logró un título de efectividad en 1969 (2.10 en 37 partidos).