CHICAGO -- Luego de una salida de siete carreras y 10 hits contra los Arizona Diamondbacks, el lanzador de los Chicago Cubs, Kyle Hendricks, prometió un mejor enfoque mental y más ''convicción'' en sus lanzamientos. Él dudó de sí mismo en el montículo hace siete días, pero rápidamente cambió el guión con una actuación dominante contra los St. Louis Cardinals el viernes.
Hendricks, de 29 años, lanzó una blanqueada con un juego completo de 81 lanzamientos, la menor cantidad de pitcheos en una blanqueada en las Grandes Ligas desde 2012.
''Tuve un poco de suerte hoy, honestamente'', dijo Hendricks despreocupadamente después de la victoria por 4-0. ''Hice muchos buenos lanzamientos, temprano''.
Obtuvo outs rápidos y lanzó a la zona de strike 78.8 por ciento de strikes. Ese es el porcentaje más alto de strikes de un abridor en esta temporada (mínimo cinco entradas). De sus 81 lanzamientos, 63 estuvieron en la zona de strike y/o abanicaron.
''La parte más loca fue que solo lanzó 18 bolas'', dijo su compañero Jon Lester. ''Son dos por entrada. Esa estadística es más impresionante que los 81 lanzamientos''. El primera base Anthony Rizzo agregó: ''Cuando se lanzan 81 lanzamientos en nueve entradas, es algo que no se ve todos los años. Estoy seguro de que hay una estadística que alguien tiene, probablemente no haya sucedido en poco tiempo''.
De hecho, hay varias estadísticas que ponen la salida en perspectiva. De acuerdo con ESPN Stats & Information, Hendricks lanzó la menor cantidad de lanzamientos en una blanqueada por un pitchers de Cubs desde Jon Lieber en 2001. También es la primera vez que un lanzador de Cachorros lanzó un juego completo en menos de 100 lanzamientos desde Carlos Zambrano en 2009. Ambos ex lanzadores estuvieron presentes el viernes, presenciando una obra maestra. Se le preguntó a Hendricks si estaba siguiendo su pequeño conteo de lanzamientos mientras se adentraba en el juego.
''Algunas de las veces miré hacia arriba y noté que era muy bajo'', respondió. ''Willy [Contreras] y yo reconocimos lo agresivos que eran, desde el principio".
Hendricks no es ajeno a lanzar una gema ya que fue el líder de efectividad en 2016. Pero ha sido un abridor lento en las últimas tres temporadas: entró al juego del viernes con una efectividad de 5.33. Eso cayó precipitadamente cuando solo permitió cuatro hits y no dio pasaporte.
''Realmente estuvo muy bien con su recta'', dijo el manager Joe Maddon. ''Tuvo un buen movimiento. Luego le rompió la curva. Cuando agrega otro pitcheo a su comando... se vuelve más difícil''.
''La curva de 69, 70 mph puede confundir que va a la cabeza de un bateador''.
La victoria fue la quinta consecutiva para los Cubs, que están a solo 1.5 juegos de los Cardinals en la pelea por el liderato de la división. Después de un inicio de 2-7, tienen un récord de 15-5, gracias a su pitcheo abridor que ha sido dominante desde el inicio del viaje de nueve juegos por carretera. Hendricks fue tan bueno y tan eficiente el viernes que le preguntaron en broma si estaba disponible para el juego del sábado.
''Por supuesto, por supuesto'', se rió. ''Se sintió un poco como un bullpen [sesión]''.
Luego se puso serio y describió lo que salió bien. Pronto descubriremos si ha dado la vuelta en la esquina en 2019, pero por un día, realmente se parece al tipo con el que muchos lo comparan: Greg Maddux. Después de todo, lanzó un Maddux el viernes --conocido por todos los que lanzan un juego completo en menos de 100 lanzamientos. Hendricks tenía 19 de sobra.
''Me condenaron a cada marcación que hicimos'', dijo Hendricks. ''Estaba tratando de mantener mi enfoque, hacer un buen lanzamiento. En mi último, hice un trabajo terrible en eso, mi enfoque mental... Esto fue mejor''.