“Duro primer día de carrera, pero sacamos adelante una buena etapa. Esto recién empieza a seguir empujando día a día”, contó Ignacio Cornejo tras finalizar quinto en el durísimo tramo que los pilotos del Dakar 2024 debieron enfrentar de entrada, en un camino sumamente complejo por las piedras que se encontraron. El chileno, con su Honda, fue el mejor sudamericano al cerrar el día a 13m43s de Ross Branch, el vencedor del especial y líder de la general (el chileno está a 14m48s en el total).
Un dato no menor para tener en cuenta la dificultad con la que se toparon los corredores: Tosha Schareina, compañero de Cornejo en el equipo oficial de HRC, sufrió una caída en el kilómetro 240 de los 414 estipulados, se fracturó la muñeca izquierda, debió ser evacuado en helicóptero y, obviamente, ya pasó a formar parte de la lista de abandonos de la edición 46 de la carrera más dura del mundo. "Debo haber golpeado algo con la rueda trasera cuando estaba adelantando a Toby Price. No iba rápido, no ha sido una caída fuerte, pero me he roto la muñeca", contó el español de 28 años.
Justamente por el accidente de Schareina es que Cornejo inicialmente figuraba cuarto en el cierre de la etapa. Es que Branch fue el que se detuvo a auxiliar al valenciano y perdió 25 minutos, tiempo que le fue restituido luego del cierre del día y así saltó al primer puesto final. “Ha sido una jornada dura, creo que hoy he pasado por todo. Pero cuando ves a alguien en el piso, lo mejor es parar y esperar hasta asegurarse de que todo va bien. Espero que Tosha vuelva pronto a subirse a la moto porque es un piloto muy bueno y un tipo estupendo y nunca gusta ver a un amigo así. En general ha sido una buena jornada para mí, muy larga y exigente. La navegación no ha sido sencilla, pero he procurado disfrutar. Bueno, hemos dejado atrás una etapa de 400 kilómetros y me siento bien de cara a mañana”, dijo el piloto de Botsuana, que corre con Hero.
Kevin Benavides, campeón defensor, fue octavo en la etapa y ocupa el mismo lugar en la general, a 16m14s de Branch. El botsuano voló en el primer especial, tanto que Ricky Brabec, el escolta en el total, está a 11m54s. Ahora, desde el estadounidense al décimo (Martin Michek) hay apenas siete minutos. “Fue bastante bien hasta el refuelling, después de ahí fue muy dura, muy lenta. Se les fue la mano con las piedras, volcánicas, sin forma, muy peligrosas. El ritmo fue muy lento, pero llegamos al final. Sigo tomando ritmo. Cuidé la pierna (NdeR: sufrió la fractura de peroné izquierdo el 3 de diciembre), traté de manejar y no apoyar el pie. Pero fue complicado. Veremos en la etapa dos con qué nos sale la organización, pero hoy se les fue un poquito la mano”, confesó el salteño en Carburando.
Entre los principales sudamericanos, el chileno Pablo Quintanilla (Honda) se ubica 11° en la general y Luciano Benavides (Husqvarna), 14°.
Las piedras, que tanto complicaron a los pilotos de motos, también puso en aprietos a los de quads. Francisco Moreno, ganador del prólogo, estuvo a punto de abandonar. Sufrió la rotura del protector de la cadena y, ante eso, se le salió siete veces de la corona y tuvo que parar a repararla. Finalmente, fue séptimo en el tramo entre los ocho cuatriciclos que quedan en carrera (se anotaron diez) y está a 35m17 de la punta que ostenta el brasileño Marcelo Medeiros. Manuel Andújar fue tercero en el día y así está también en el total.
A la espera de un terreno más amigable, los pilotos disputarán este domingo la segunda etapa, que unirá Al Henakiyah-Al Duwadimi, con 463 kilómetros cronometrados.