BARCELONA -- “Estoy muy contento. Flipado y con esta sonrisa espero seguir siempre. Gracias a Dios todo salió bien”. Marlon Santos, 21 años y llegado desde Brasil en silencio, cumplió “un sueño” en Escocia, cuando a falta de 18 minutos para acabar, Luis Enrique le puso en el escenario en lugar de Piqué.
Cedido por el Fluminense, el central, quien admira “a Thiago Silva” en su posición y se fija a diario “en Piqué”, mostró unos galones inesperados. Sereno y firme en el campo, se convirtió en el brasileño número 31 en la historia del Barcelona, después de Douglas… Pero mostrando una esperanza de futuro mucho más allá del lateral hoy en el Sporting.
Recuperó tres balones, rechazó uno, no perdió ninguno y hasta se atrevió a sacar un pase para ganarse elogio y hacer dudar ante los cinco millones de euros que el Barcelona debería pagar por hacerse con su fichaje definitivo esta temporada.
Desde Fausto dos Santos, quien entre 1931 y 1932 disputó 30 partidos en el Barça y hasta esta presentación de Marlon, la presencia de futbolistas brasileños mantiene en el plano a los Ronaldinho, Ronaldo, Rivaldo, Romario o Neymar en la época moderna, sin olvidar a Evaristo de Macedo, considerado como el primer crack del país que jugó de azulgrana: 173 goles entre 1957 y 1962.
“Ha entrado porque es un jugador que nos viene muy bien, que está en el filial trabajando bien y en quien confiamos”, solventó Luis Enrique al referirse a su presentación, rechazando con una sonrisa que se le pudiera considerar canterano “porque ha venido de Brasil”.
De Brasil llegó, y de forma extraña, por cuanto se asegura alrededor del club que Marlon se presentó directamente a través de su representante a los ojeadores del Barcelona en su país. Que le dieron el visto bueno, con reservas… Y que se arriesgó a jugar en el filial abandonando el Fluminense con un salario menor al que tenía en el club carioca.
El papel de Douglas, su fracaso, provocó que en las oficinas del Camp Nou existieran dudas acerca de arriesgarse con su fichaje, que mantenía voces de reserva. Pero su presentación en Glasgow y ante un Celtic frente al que, curiosamente debutó durante la pretemporada, le han dado un plus a Marlon.