Peñarol brindó un gran golpe en el juego de ida de los cuartos de final de la CONMEBOL Libertadores al vencer a Flamengo 1-0 en Rio de Janeiro.
Esto le permite al equipo de Diego Aguirre tener la tranquilidad de que, con un empate, le alcanza para llegar a las semifinales del torneo.
La obligación pasa a ser de Flamengo, que debe ganar de visitante, una situación a la cual se vio enfrentado en dos oportunidades a lo largo de su historia.
La primera vez que Flamengo debió remontar un resultado fuera de casa, por los cuartos de final de la Libertadores, ocurrió en la edición de 1993 cuando en el juego de ida disputado en Maracaná igualó 1-1 con San Pablo.
En la revancha, que se jugó en Morumbí, los paulistas ganaron 2 a 0 y eliminaron al Mengao.
La segunda vez que Flamengo perdió el juego de ida en Maracaná y debió salir a buscar la clasificación a semifinales afuera tuvo a varios uruguayos como protagonistas.
En el 2010, el club carioca se cruzó contra Universidad de Chile, que era dirigida técnicamente por Gerardo Pelusso. En el partido de ida, el equipo chileno sorprendió ganando 3 a 2 en Maracaná con goles de Olarra, y los uruguayos Mauricio Victorino y Álvaro Fernández.
Esto obligaba a Flamengo a ganar la revancha en el Estadio Santa Laura. El club brasileño ganó 2 a 1 pero, debido a que por entonces se le daba un valor doble a los goles de visitante, terminó clasificando al equipo trasandino.