COSTA RICA -- La inmigración ilegal es uno de los aspectos que más preocupa al Gobierno de Costa Rica durante la pandemia del COVID – 19, el Ministerio de Seguridad Pública ha tomado sus previsiones y envió a la frontera con Nicaragua más efectivos que estén atentos a patrullar la línea fronteriza, entre esos el árbitro de fútbol playa, Luis Enrique Torres.
Con 15 años de experiencia, Luis Enrique Torres es árbitro con gafete FIFA desde el 2019, sin embargo, su trabajo principal es ser policía, labor que asegura cumple con mucha responsabilidad y entrega, sin embargo, el temor diario por no saber con qué se vaya a encontrar lo acompaña.
“Desde que esta pandemia inició ha sido una gran responsabilidad. Nosotros tenemos el deber de impedir que algún extranjero ingrese al territorio nacional. Intervenimos muchos buses, gente indocumentada que no sabemos cuál es su estado de salud”, indicó Luis Enrique Torres en entrevista a la FEDEFUTBOL.
El oriundo de Cachí de Cartago tiene una labor desgastante, debe realizar patrullajes a pie, detectando personas que pretenden ingresar al país de manera ilegal en los 300km de frontera entre Costa Rica y Nicaragua.
“Los puntos ciegos en los casi 300 kilómetros de frontera son los más complejos, ya que los traficantes conocen que por estos sitios podría ser más fácil el paso. Estos son los riesgos que nos tomamos todos los días como parte de nuestras labores. Es para contribuir con la salud de todos los habitantes del país que aquí estoy bien plantado, con el silbato en la mano”, dijo el oficial de policía.
A pesar de que el fútbol playa en Costa Rica está lejano a regresar, Luis Enrique Torres de 36 años mantiene una comunicación constante con el preparador físico de la FEDEFUTBOL para estar listo cuando la pandemia del COVID – 19 se supere y las actividades atléticas en Costa Rica se puedan reanudar.
“Estar arbitrando es lo que más añoro, estrechar la mano de los jugadores cuando dirigís un buen partido, y abrazar con tranquilidad a mis hijos también se extraña. Pero ahora son más importantes nuestras vidas, por eso les pido a los costarricenses que al igual que nosotros, se pongan la camiseta porque aún nos falta el pitazo final”, finalizó el árbitro Luis Enrique Torres.