BARCELONA -- El Barcelona cerró a la carrera el mercado inglés con la doble operación de Yerry Mina y André Gomes pero sin poder colocar como pretendía a Marlon Santos y Paco Alcácer, futbolistas que se mantienen en la rampa de salida del club con distintas previsiones. De hecho, en una decisión fulminante, el central brasileño pasó de transferible a renovado y su futuro ahora se contempla en una cesión con el Galatasaray turco en el primer plano.
Marlon, con el beneplácito del Barça, fue ofrecido por diversos representantes a otros tantos clubes ingleses. Primero se le relacionó con un traspaso al West Ham y al final se le intentó colocar, cedido, en el Newcastle, desde donde se desmintió haber tenido interés en una incorporación que, desde Italia, sí se admite por parte del Sassuolo... Aunque lejos de una pretensión de ficharle por los 14 millones de dólares anunciados.
Con el Niza, donde jugó la última temporada como cedido, esperando acontecimientos, el Galatasaray, que fichó al lateral japonés Nagatomo e incorporó cedido desde el Everton al extremo nigeriano Onyekuru para un proyecto que tiene en la Champions objetivo destacado presentó este jueves una propuesta de cesión por una temporada que el Barça está dispuesto a atender, entendiendo que el club turco se haría cargo del salario del jugador.
NEGOCIO
El Barcelona pagó por Marlon 5,7 millones de euros en el verano de 2017 al Fluminense, días antes de cederle al Niza, y ahora, viendo la imposibilidad de traspasarle, solventó prolongar su contrato que acababa en 2020 por dos temporadas más, confiando en que esta temporada se revalorice para, en un futuro, hacer negocio con su venta tal y como sucedió, aunque sea en menor cuantía, con Yerry Mina.
A una semana que se cierre el mercado en el fútbol italiano, el club azulgrana entiende la urgencia que se le viene encima con solucionar la salida del central brasileño... Y de otros jugadores como Alcácer, Rafinha o, incluso, Denis Suárez y Jasper Cillessen, que han sido valorados por diversos clubes de la Serie A y cuya salida del Camp Nou no se considera descartada, por más que cada caso tiene sus condicionantes particulares.