El Barcelona cerró el mercado de invierno más inusual de los últimos años, no incorporando a ningún jugador a su plantilla y concediendo la baja a cuatro futbolistas, siendo Moussa Wagué, este mismo viernes, el último al concretarse su cesión al Niza, que se reserva una opción de compra, hasta final de temporada.
El lateral senegalés, de 21 años y fichado la pasada temporada al KAS Eupen por 5 millones de euros para empezar en el filial como apuesta de futuro, fue ascendido este curso al primer equipo, aunque ya había jugado tres encuentros con Valverde (Huesca, Celta y Eibar) el anterior. Sin embargo, su prestancia esta campaña fue apenas testimonial, tomando parte en tres partidos, siempre con el anterior técnico (frente a Leganés, Borussia Dortmund e Inter de Milán) y confirmándose como un jugador prescindible… Y con quien quedó claro desde el primer momento que no iba a contar Quique Setién.
Aunque la idea inicial del club era que se convirtiera en la alternativa a Semedo en el lateral derecho, contando con Sergi Roberto como centrocampista, el catalán ha acabado actuando en no pocos partidos en la defensa, desplazando a Wagué a una invisibilidad que invitaba a su más que posible salida que, finalmente, se concretó en este último día de mercado.
Los números de Wagué en el Barça se limitan a 406 minutos divididos en 6 partidos con el Barça desde su llegada y no teniendo la ocasión de mostrar las expectativas a su alrededor cuando llegó al Camp Nou, después de su buena prestancia durante el Mundial de Rusia, donde se convirtió en el jugador africano más joven de la historia en marcar un gol en el máximo torneo de selecciones.
SIN FICHAJES
El lateral senegalés se convierte en el cuarto y último jugador que abandona la disciplina azulgrana en este mercado de invierno, en una operación salida que inició Carles Aleñá con su cesión al Celta, siguió Jean-Claire Todibo con su marcha al Schalke, cedido con opción de compra por 25 millones de euros, y continuó Carles Pérez, cedido a la Roma por un millón de euros a los que deberá sumar otros 11 al acabar la temporada como fichaje definitivo.
Por el contrario, y a pesar de la necesidad evidente, y proclamada desde el propio club, de fichar a un delantero para ocupar la plaza del lesionado Luis Suárez, el Barça cerró el mercado sin reforzar la plantilla y después de dos semanas frenéticas que comenzaron con la negociación fallida con el Valencia por Rodrigo y acabaron, el jueves, conociéndose la operación cortada por Bakambu.
El delantero congolés, de 28 años, abandonó la concentración de su equipo, el Beijing Gouan, en Seúl para viajar a Barcelona, vía Hong-Kong, al conocer la
intención azulgrana de incorporarle como cedido hasta final de curso. Al llegar al aeropuerto de Hong-Kong, sin embargo, Bakambu fue informado de que el Barça había decidido echarse atrás en sus intenciones y regresó, de nuevo, a la concentración del Gouan para jugar la Champions asiática.