Osasuna volvió a entrenarse en Tajonar para preparar su duelo del jueves ante el Eibar y lo hizo con la buena noticia de Facundo Roncaglia, jugador que regresó a la dinámica de grupo después de haber trabajado de manera individual durante los últimos días.
El argentino sufrió hace dos semanas una lesión muscular en el vasto interno de la pierna izquierda que no le permitió ayudar al equipo que entrena Jagoba Arrasate en el objetivo de la permanencia.
El de Berriatúa recupera de esta forma un jugador que puede actuar tanto en el lateral derecho para ir rotando con Nacho Vidal como en el centro de la defensa para hacer lo propio con el resto de zagueros centrales.
Los rojillos se ejercitaron en las instalaciones a través de técnica, posesiones y partidos de fútbol para afinar la puntería de cara al partido que disputarán en Ipurua el próximo jueves.
Por su parte, Rubén Martínez y Rober Ibáñez han proseguido con su trabajo individual para restablecerse de sus respectivas lesiones. No parece por lo tanto que puedan estar disponibles para la nueva jornada.
Osasuna está virtualmente salvado, pero deberá seguir en su lucha por la salvación matemática para no caer en las últimas jornadas en una autocomplacencia que podría empañar en cierto modo la fantástica temporada rojilla.
El miércoles, el conjunto navarro concluirá la preparación del partido ante los armeros en El Sadar en una sesión que se desarrollará a partir de las 10 a puerta cerrada.