BARCELONA -- Sergio Busquets seguirá en el Barcelona. Al menos de momento. El mediocampista catalán, de 32 años, mantuvo este martes un encuentro personal con Ronald Koeman en la que el holandés le trasladó su deseo de seguir contando con él en la plantilla azulgrana, aunque revelándole que su protagonismo no será, de entrada, intocable, ni mucho menos, como en las temporadas anteriores.
Después del lunes vino el martes. Y tras conocer por boca del entrenador, en una simple llamada telefónica, Luis Suárez y Arturo Vidal que no entraban en sus planes, Sergio Busquets acudió, personalmente a las instalaciones del club para reunirse con Ronald Koeman, quien le trasladó, confirmaron a ESPN Digital fuentes cercanas, que sí cuenta con él para el próximo curso.
Tal como un día antes, Koeman llegó a las nueve de la mañana a la ciudad deportiva y no mucho después lo hizo Busquets, reuniéndose ambos algo más de media hora en el despacho del técnico en una charla durante la cual el holandés le dio a conocer sus planes, en los que la figura del canterano mantiene un puesto aunque pudiera no ser intocable como en los años pasados.
El holandés ya avisó en días anteriores, en diversas entrevistas, que tiene la intención de variar la posición de Frenkie de Jong en el campo, resituándolo en la posición de mediocentro, y ese cambio afectaría directamente a Busquets, que de entrada debería acostumbrarse a contar con menos minutos en el once titular.
Bajo contrato hasta 2023 y disfrutando de uno de los salarios de la parte alta en la plantilla (15 millones de euros brutos por temporada), resolver el compromiso del canterano, al contrario que en los casos de Suárez, Vidal o Rakitic, se entiende una quimera en el club y ese problema, unido a la confianza que mantiene Koeman en sus prestaciones, habrían tenido una trascendencia definitiva en su continuidad, tal y como ocurrió con Jordi Alba, cuyo contrato en el club se prolonga hasta 2024 y que ya fue contactado por el entrenador el último viernes para confirmarle su permanencia.