El mediocampista brasileño debutó con un doblete en Legendarios de la Liga Mayor de Futsal de Guatemala
GUATEMALA -- Sintió que ya no disfrutaba lo que hacía y decidió dar un paso al costado. Ahora ha vuelto a emocionarse. Eso sí, ya no en el fútbol once, sino en el futsal.
Después de su paso por Deportivo Iztapa, el mediocampista brasileño Rafael Da Roza, más conocido como Rafinha, llegó a Santa Lucía Cotzulmalguapa en donde fue parte del histórico título de Liga Nacional en el Torneo Clausura 2021.
Las cosas pintaban bien y llegó como refuerzo de lujo al Deportivo Guastatoya, con el que iba disputar un torneo internacional. Pero, las cosas no salieron como se esperaba. No le fue muy bien y en el interín de la temporada se terminó la relación.
“Estaba en Guastatoya y pasaron cosas que nosotros preferimos evitar, platicamos y decidimos no continuar. No tengo ningún problema con la directiva, fueron otro tipo de cosas. No me sentía cómodo, no podía ser yo, entonces para estar así, mejor preferí dar un paso al costado y en ese momento la mayoría de equipos de Liga Nacional ya estaban armados y ya tenían a todos sus extranjeros”.
Así que atendió la invitación de la familia Ruiz, para unirse a los entrenamientos de Legendarios, equipo de la Liga Mayor de Futsal de Guatemala. “Necesitaba ir a un lugar donde sentirme contento, alegre, estar a la par de compañeros que me quisieran, que conocieran como soy, de sentirme bien. Yo priorizo eso, el estar en lugares donde me sienta bien, donde me sienta cómodo para jugar”.
“El profe Hans -Ruiz, técnico de Legendarios- me invitó para que fuera a entrenar con ellos, para no perder ritmo, para no perder la parte física, mientras salía algo de Liga Nacional en el fútbol once. Al estar entrenando despertó esa pasión que tenía de niño de jugar futsal, entonces platiqué con mi representante, con mi familia, y aproveché a jugar futsal”.
Ya entrenando con el equipo y con el Torneo Clausura 2022 en acción, empezaron a llegar ofertas de equipos que no habían iniciado bien, pero Rafinha decidió seguir en el futsal. “Yo ya tenía la pasión despierta y preferí jugar futsal este torneo. Para el otro, si sale alguna oferta en Liga Nacional, la tomaré”.
“Estoy muy contento porque es un deporte que me encanta mucho. Desde niño yo intenté jugar futsal porque es muy importante para que los jugadores tengan una buena base y después de años de no jugar, ahora se da la oportunidad en Guatemala y eso me pone muy contento”.
Reclama apoyo
El talentoso brasileño conoce el futsal del país, afirma que lo sigue desde hace algún tiempo. “Sigo al futsal de Guatemala desde hace algunos años porque tengo muy buenos amigos. Siempre que tenía tiempo me invitaban a ver los partidos. Hay buen nivel, no es casualidad que la Selección de Guatemala ha jugado varios mundiales. Hay muy buenos jugadores, el nivel es competitivo”.
Pero, lamenta el poco apoyo que se recibe. “He visto que tienen muy poco apoyo de todos lados y no debería ser así porque, aparte de ser un deporte bonito, es un deporte que ha llevado el nombre de Guatemala a Mundiales. Tendría que tener más apoyo y el deporte y los jugadores deberían de ser más valorados”.
“He platicado con varios jugadores para saber cómo viven, qué hacen, cómo entrenan y la verdad me sorprendió bastante porque, para que tengan una idea, los equipos solo pueden entrenar uno o dos veces por semana porque solo hay un domo para entrenar. Es muy poco para un deporte donde se pueden sacar muchas cosas”.