Con un gol por la vía del juego aéreo en los últimos cinco partidos, Colombia extravió su buen rendimiento en las Eliminatorias y puso en riesgo su clasificación al Campeonato Mundial de 2026.
Se olvidó de marcar goles por arriba y dejó de ganar en las últimas jornadas con un registro de tres derrotas y dos empates. El 2025 no ha sido benévolo con los dirigidos por Néstor Lorenzo.
En la más reciente Copa América fue su fuerte convirtiendo cinco goles por la vía área, con un James Rodríguez pletórico, quien fue clave con los cobros de tiros libres o mediante centros con pelota en movimiento. Fueron seis asistencias, cuatro de ellas por la vía aérea del actual jugador del León de México.
En el fútbol aéreo de Eliminatoria le hizo goles a Brasil, Perú, Argentina y Chile. Frente a Uruguay convirtió un tanto de tiro libre de Juan Fernando Quintero y otro con una jugada en movimiento dentro del área con definición de Carlos Gómez en la derrota en el Centenario 2-3.
Por último, a Paraguay convirtió dos goles en jugada en movimiento, primero tras una presión en campo contrario y definición dentro del área de Luis Díaz; y segundo, en un contragolpe que también finalizó dentro del área con anotación de Jhon Durán para el 2-2 final.
Pero... ¿por qué Colombia dejó de utilizar el arma del juego aéreo?
En los últimos partidos la Selección Tricolor ha perdido el control del juego, con muy poca creación de acciones de peligro, sin la recurrente salida de sus laterales esto debido a que la posesión de la pelota estuvo más dividida.
Sin la posesión de la pelota es más difícil para James entrar en el circuito del equipo y servir de enlace entre el medio campo y los hombres de ataque. Su pegada se ha extinguido porque no hay caminos en los que pueda transitar libremente con la libertad de tirar centros, cobrar tiros libres o tiros de esquina.
Colombia, en los últimos tres partidos como local frente a Brasil, Paraguay y Perú tuvo una escasa producción de tiros de esquina, una de las alternativas que tenía para llegar a gol. En los tres juegos solamente se cobraron once lanzamientos para un promedio muy bajo de menos de cuatro por partido. Tampoco generó muchas faltas cerca al área rival.
Además, los delanteros que ha utilizado el técnico Néstor Lorenzo no pasan por un buen momento en la Selección Colombia, ninguno se ha consolidado y han desperdiciado las pocas oportunidades de gol que se han creado.
Jhon Córdoba, Jhon Jader Durán, Rafael Santos Borré, Luis Suárez, entre otros no han marcado la diferencia en el ataque colombiano.
