Moisés Caicedo jugó su primer partido en un torneo europeo, en la victoria de Chelsea 2-0 ante Servette, en los playoffs de la UEFA Conference League. Para el ecuatoriano el partido fue redondo, pues además fue capitán de los Blues por primera vez y su equipo logró ventaja para la vuelta.
El ecuatoriano fue uno de los titulares habituales que arrancó el partido, en una formación plagada de muchos futbolistas alternantes, con menos minutos o recién llegados. Por esa razón le entregaron el brazalete en el partido en Stamford Bridge.
El partido no resultó tan sencillo para Chelsea, que a pesar del dominio no podía reflejar eso en el marcador. El primer tiempo terminó con el marcador sin goles y con algunas dudas por el juego del equipo de Enzo Maresca.
Las cosas cambiaron en la segunda parte, cuando Chelsea jugó con más decisión. Así llegó el primer gol del partido, desde el punto penal, de Christopher Nkunku.
Caicedo trató de hacer su juego habitual y estuvo respaldado por Kiernan Dewsbury-Hall, para la labor de marca y apoyo en el juego ofensivo.
Maresca hizo algunos cambios en los que ingresaron varios estelares, como Enzo Fernández, Cole Palmer o Malo Gusto. Justamente el argentino dio una gran asistencia para el segundo gol, con la buena definición de Noni Madueke.
A los 84 minutos salió Caicedo, entre los aplausos del público, para el ingreso de Romeo Lavia. Le dejó la banda a Enzo Fernández.
Ahora se preparan para el duelo del fin de semana en la Premier League, contra Wolverhampton y la próxima semana será la vuelta ante Servette.