El retorno de David Terans a Peñarol, confirmado por el presidente Ignacio Ruglio a través de su estado de WhatsApp, plantea una interrogante que habilita al juego periodístico: ¿Leo Fernández y Terans pueden jugar juntos?
Está claro que en el fútbol no hay imposibles y mucho menos cuando se trata de dos buenos jugadores. De hecho, hay una máxima que dice: Para los talentos, siempre hay lugar.
¿Por qué surge la interrogante? Por las características de juego de ambos futbolistas y el sistema de juego que llevó adelante el Peñarol de Diego Aguirre a lo largo de la pasada temporada.
Está claro que Peñarol basa su juego en extremos y un creativo por detrás del delantero que es referencia de área. El planteo es un 4-2-3-1.
Generalmente Leo Fernández es el que juega por detrás del 9, con absoluta libertad de movimientos. Esto le permite conectar con los extremos, utilizar al 9 como pase de descarga, generar faltas en las cercanías del área -con el peligro que ello implica por su pegada- y estar cerca de los volantes que juegan de doble 5 para recibir el balón rápidamente.
Está claro que el sistema no es rígido, como nada en el fútbol, y que en muchas ocasiones Peñarol puede pasar a un 4-3-3, en el propio partido, con Leo como enganche.
David Terans tiene características similares a las de Leo. Habitualmente juega en la misma posición, por detrás del 9.
Bajo estas perspectivas se vuelve a la pregunta inicial: ¿Cómo hace Diego Aguirre para hacer convivir a los dos talentos en la oncena titular?
Tiene varias opciones. Una de ellas puede ser que Terans y Leo jueguen juntos por delante de los dos volantes de marca, armando un cuadrado en el medio. Claro que eso implica desarmar el modelo de juego y jugar sin extremos, es decir, con un 4-4-2.
Otra opción puede ser un 4-1-3-2. Allí jugaría con un volante tapón, extremos que deberían colaborar con la marca, Leo suelto, y Terans en ofensiva acompañando a Maxi Silvera.
Un detalle que no se puede pasar por alto es que el año pasado Leo Fernández llegó a jugar de doble 5. Lo hizo bien, pero el tema es que el arco rival le queda más lejos.
Y otra opción que tiene el DT es sacrificar a uno de los dos -que por características puede ser Terans- para jugar como extremo. Claro que ahí debe sacar a uno de los dos titulares: Javier Cabrera o Jaime Báez.
Las posibilidades de que Leo y Terans puedan jugar juntos en Peñarol son variadas. Todo dependerá de la decisión del técnico, del análisis de su equipo, de momentos, lesiones, y hasta características de los rivales y necesidades propias. Aguirre tiene un nuevo reto: hacer convivir a dos talentos en su equipo.