Con 18 años, en Quinta división, tiene bien claro cuál es su sueño a nivel deportivo: quiere jugar en Primera, con los referentes que admira, con esos delanteros a los que intenta imitar. Luca de Santi comenzó a jugar al hockey a los cuatro años en el club Ciudad de Buenos Aires donde sigue los pasos de su papá. Hoy, es el goleador de la categoría previa al Plantel Superior con 18 tantos en 15 fechas.
“El club significa muchísimo para mí. Es como mi segunda casa, desde muy chico que mis fines de semanas son sólo de club y siempre acompañado con los que hoy siguen siendo mis amigos y compañeros”, explicó Luca sobre lo que siente por Ciudad.
Al menos dos días por semana, muchas veces un tercer estímulo de entrenamiento y sábados y domingos ahí, hacen que el amor por los clubes sea realmente grande y eso intensifica muchos otros sentimientos que rodean la actividad, por ejemplo hacer un gol. “Cuando convierto siento mucha alegría y satisfacción de poder ayudar al equipo desde el rol que me toca a mí como delantero, y cuanto más pueda ayudar al equipo mejor. Y también siempre es lindo el festejo y el abrazo de gol con todos”, dijo De Santis con una sonrisa.
Cuando fue consultado por el gol que más recuerda, la esencia de él se dejó ver y puso por delante lo colectivo. “Me cuesta elegir uno la verdad, pero de los más recientes el que más me gusta es uno a Mitre. Fue una hermosa jugada en equipo de varios de pases que la pude terminar con un desvío directo al ángulo. Me quedo más con la jugada del gol, que con mi definición porque representa perfectamente nuestro estilo e idea de juego como club”, respondió el jugador de Núñez.
Aún no debutó en Primera y sueña con ese momento. Lo desea, lo anhela y se lo imagina como parte de los logros que puede alcanzar quien juega al hockey y ama los colores que representa. Además de vivir eso, tiene la ilusión de compartir cancha con los referentes: “Joaco González, Bauti Capurro y Gero Costa Díaz, siempre trató de mirar y aprender lo que pueda de ello”.