WrestleMania 36 cobra vida este fin de semana de la manera más inusual debido a las circunstancias que vivimos a raíz de la pandemia de coronavirus, demostrando que el show debe continuar.
La propagación de la pandemia obligó a la WWE a mover su evento cumbre de sede, dividirlo en dos noches y realizarlo a puerta cerrada con solo personal esencial presente. Es una semana de WrestleMania muy diferente a la que los fanáticos están acostumbrados, pero eso no quiere decir que la celebración de 35 años de historia no se deja sentir mientras más nos acercamos al evento.
Con eso en mente, y en honor a dicha celebración, nuestro panel de expertos nos habla un poco de todo lo que es WrestleMania, y como su impacto se define y siente mucho más allá de quien gana y pierde dentro del ring.
¿Cuál es tu lucha de ensueño de WrestleMania?
Alfredo Berríos: No soy fan de hacer “fantasy booking” en donde enfrento a un luchador de cierta época con otro de una diferente. Sin embargo, creo que el encuentro de ensueño de WrestleMania que nunca vimos es Undertaker vs Sting. En sus personajes actuales, enfrentaría a los dos íconos de las principales organizaciones de lucha libre en los últimos 30 años. No sería la primera vez que lucharían. Durante su estadía en WCW como Mean Mark Callous, ambos se enfrentaron en más de una ocasión, aunque con personajes y estilos diferentes. En la década de 1990, Mark Calaway, nombre verdadero del Undertaker, se presentaba como un hombre grande con enormes habilidades y velocidad, que caminaba la tercera cuerda para terminar con sus oponentes. Sting, por su parte, era el luchador colorido, de muchas expresiones faciales y enormes saltos. Ambos luchadores evolucionaron a personajes más obscuros y meticulosos, que habrían presentado una lucha más lenta, pero con dos habilidosos atletas que harían vibrar cualquier instalación.
El único problema con esta lucha es que el resultado sería predeterminado sin siquiera tocar el ring. Por ser un personaje de WWE, Vince McMahon nunca le habría hecho perder ante el ícono de la compañía rival. De hecho, si recordamos la corta corrida de Sting, fue derrotado por Triple H en WM 31 y perdió y se lesionó en su última lucha ante Seth Rollins pocos meses después. Aún así, sería el sueño de muchos fans el poderlos ver en un cuadrilátero sin importar que Sting tiene 61 años y Taker 55.
Héctor Cruz: Muchas veces me han hecho esa pregunta, y mi respuesta siempre ha sido la misma: Undertaker vs. Sting. Es una elección obvia, compartida por muchos, ya que ambos han sido dos de los nombres más grandes en el deporte en el último par de décadas, y siempre han estado vinculados debido a la naturaleza similar de sus personajes. Ambos se han enfrentado en el pasado, pero nunca en el show más grande que tiene la empresa. Claro, cada día que pasa esa probabilidad se aleja cada vez más, pero soñar no cuesta nada, ¿no?
Me permito incluir algunas otras posibilidades que me hubiese encantado ver:
• Eddie Guerrero vs HBK: Se suponía que se enfrentaran en WrestleMania 22, pero con el fallecimiento de Guerrero en 2005, no pudo ser.
• The Rock vs. Shawn Michaels: Por alguna razón, dos de los nombres más grandes en la historia de WWE nunca chocaron en WrestleMania.
• Shawn Michaels vs. Sting: Nunca estuvieron en la misma empresa (Michaels nunca se fue a WCW y Sting llegó muy tarde a WWE).
• Steve Austin vs. CM Punk: El bebedor de cerveza por excelencia vs el 'straight edge'. Se llegaron a lanzar retos por redes sociales, pero ahí quedó todo.
Víctor López: Undertaker vs Sting es probablemente la selección número uno en consenso para esta pregunta, y con razón. En retrospectiva, WWE debió hacer la lucha en WM 31 para el debut de Sting con la compañía, pero no es la primera vez que enfrentamientos de ensueño se desvanecen antes de que sean realidad. Todavía pienso que es una pena que Taker y Cena nunca tuvieron una lucha digna de WrestleMania durante más de una década trabajando juntos, y el fanático old school en mí también sueña con Hogan-Piper (WM 2) y Hogan-Flair (WM 8), entre varias otras.
¿Cuál es tu WrestleMania favorito?
Berríos: En mis libros tengo dos, y ambos son por la misma razón, en donde una trama del desfavorecido fue llevada a la perfección. La magia de cualquier programa de lucha libre es poder hilar una historia que involucre a los fanáticos de principio a fin y que sea creíble. Aunque no se celebró en un ring de WWE ni en la compañía, la lucha de Sting vs Hulk Hogan en Starrcade 97 es el perfecto ejemplo en donde los fans no podían despegarse de sus televisores por ver cómo Sting acorralaba a Hogan y la NWO para llevarse el título.
La historia de Daniel Bryan camino a conquistar el título en WrestleMania XXX es la ejecución perfecta en WWE, en donde Bryan superó todos los obstáculos y piedras que le colocaron en el camino, que inició con su corta corrida del título que ganó en Summer Slam en 2013, en donde Triple H lo traicionó al formar The Authority. Ese WrestleMania fue la culminación del Yes Movement, en donde muchos entienden que los fans obligaron a la WWE a colocarle el título a Bryan, quien tuvo un empuje orgánico de los fans. Bryan tuvo que vencer a Triple H para ser insertado en una lucha Tirple Amenaza ante Batista y Randy Orton en donde ganó el título.
Mención de Honor a WrestleMania XX, donde Chris Benoit y Eddie Guerrero ganaron los campeonatos peso pesado y la WWE, respectivamente, y WrestleMania III, en donde Hulk Hogan derrotó a Andre el Gigante mediante reventón ante más de 90,000 fans en el Pontiac Silverdome.
Cruz: Aquí me tengo que tomar la libertad de seleccionar dos, por dos motivos particulares y diferentes.
1. WrestleMania XXX en 2013, donde Daniel Bryan tuvo que superar varios obstáculos para alzarse con el título mundial peso completo de la WWE. La clásica historia donde el desfavorecido en todo sentido se impone ante la maldad y la traición de sus superiores. Bryan tuvo que vencer al legendario luchador Triple H, solo para ser colocado en otra lucha, esta de triple amenaza, ante Batista y Randy Orton. Este combate fue la consolidación del llamado ¡Yes Movement! (conocido así porque el ¡Yes! es la seña con la que Bryan es recibido por la fanaticada a su entrada al escenario en cada lucha). Bryan se las arregló para colocar a Batista en su llave de rendición (el ¡Yes Lock!) para llevarse la victoria ante una eufórica asistencia de 75,167 personas en el Superdome de New Orleans.
2. WrestleMania 33 en 2017, donde Brock Lesnar venció a Goldberg para convertirse en Campeón Universal (el primero en la historia en haber conquistado tanto el título mundial como el Universal de la WWE), y Randy Orton venció a Bray Wyatt para ganar su 9º cetro mundial de WWE ante 75,245 fanáticos en el Camping World Stadium de Orlando, FL. La pregunta es, ¿por qué seleccioné este evento en particular como uno de mis favoritos? Sencillo: porque fue el primero (y el único a la fecha), que tuve la oportunidad de presenciar en vivo (casualmente en cobertura de ESPN con quien comparto estas líneas, mi colega y amigo Alfredo Berríos). Fue una experiencia absolutamente alucinante, desde el montaje y la precisión de un reloj suizo con la que WWE lleva sus eventos, hasta la majestuosidad de la ceremonia del Salón de la Fama el día anterior (donde fueron exaltados entre otros Kurt Angle, Theodore Long, Beth Phoenix, Rick Rude y The Rock N'Roll Express). Una vivencia que siempre llevaré en mi mente y mi corazón, y que espero volver a repetir muy pronto (sea como fan o como periodista).
López: De WrestleMania III a WrestleMania X, a WrestleMania 19 y WrestleMania 28 y 30, hay varias ediciones del evento cumbre de la WWE para cumplir con los gustos de todos. Para mí, es WrestleMania 17, la culminación del Attitude Era. Austin vs Rock II como evento principal tiene pocas comparativas en la historia y el segundo TLC entre los Hardys, Dudleys y Edge & Christian sigue siendo el estándar a seguir para este tipo de lucha.
Cierto o falso: Shawn Michaels es ‘Mr. WrestleMania’.
Berríos: Cierto. Shawn Michaels es uno de los más grandes luchadores que ha dado el negocio en toda la historia, no solamente por su carisma ante los fanáticos, pero por ser uno de los mejores técnicos dentro del ring.
Muchos dicen que el Heartbreak Kid podía hacer lucir bien a una escoba en el ring y es la verdad. Parte de la magia de la lucha libre es hacer creíble un encuentro y Michaels tenía la capacidad de cargar a su oponente sin importar quién fuese, bien sea un luchador de gran técnica de altas credenciales o un aporreador, aparte de Michaels ser uno de los mejores luchadores en vender golpes y llaves de sus oponentes.
Michaels participó en 17 WrestleManias, destacándose su primer gran encuentro en WM X, en donde protagonizó un clásico encuentro de escaleras ante Razor Ramon (Scott Hall) que es la vara para ese tipo de encuentros. Fue antagonista rudo y protagonista técnico en encuentros de calidad ante Bret Hart, Chris Jericho, Kurt Angle y Ric Flair, aunque salió con la mano alzada en apenas seis de los encuentros. Retiró a Flair de la lucha libre en WM XXIV y fue derrotado y retirado por el Undertaker en WM XXVI en encuentros memorables, no solo por la calidad luchística de ambos, sino el desarrollo de la trama y su culminación.
Cruz: Hasta la pregunta ofende... como diría Daniel Bryan: ¡Sí, Sí, Sí! Nadie más que Michaels tiene un mejor historial en producir grandes luchas cuando de verdad cuentan.
Pese a haberse retirado prematuramente por una lesión de espalda en 1998, logró regresar en 2002 a tiempo completo al 'circulo cuadrado' para seguir elevado su legado a un nivel completamente diferente al de los demás.
Para muestra, les dejamos un botón: Según un ránking publicado en 2016 por la propia WWE, Michaels formó parte de cinco de las 10 mejores luchas en la historia del "Show de Shows", y ocho de las mejores 17. Otro ejemplo: su lucha de WrestleMania 24 ante Ric Flair fue condecorada como Lucha de la Década por el portal especializado Wrestling Observer. Y su encuentro ante "Stone Cold' Steve Austin en WrestleMania XIV es, a juicio de muchos, uno de las mejores, sino la mejor en la historia del evento.
En total, encabezó el espectáculo en cuatro ocasiones, algo a lo que muchos ni siquiera se acercan.
López: Cierto. Bueno, es su apodo, ¿verdad? Undertaker presenta también un caso convincente para la designación, y no me sentiría indignado con su nombramiento. Pero el currículum de luchas estelares y de calidad de HBK (vs Razor WM X, vs Hart WM 12, vs Austin WM 14, vs Jericho WM 19, vs Angle WM 21, vs Cena en WM 23, vs Flair WM 24, Taker WM 25 y 26) lo separa de los demás.