No podría ser de otra forma. Si este fue el cierre de la era de los hermanos Díaz en el UFC, sus fans pueden sentirse satisfechos. Nate se llevó otra victoria en un combate estelar, armado con 24 horas de anticipación, en el que llegaba como no favorito.
Con tres cambios en las peleas principales, pocos promotores podrían mantener la expectativa en el evento, pero de alguna forma los fans respondieron y llenaron el T-Mobile Arena en Las Vegas para una cartelera estelar que tuvo de todo.
Desde la sorpresa de Johnny Walker a Ion Cutelaba en la pelea que abrió la tarjeta principal, el inexplicable nocaut de Irene Aldana y la aplanadora de Khamzat Chimaev, UFC 279 salió a flote, pero será recordado por las extrañas circunstancias que lo rodearon. Sin conferencia de prensa, con media cartelera en peso pactado y el dulce sabor de la despedida de Nate Díaz, al menos por el momento.
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Nate siempre será Nate
A los 37 años, Nate Díaz tiene poco que probarle al mundo. Nunca ganó un cinturón de UFC, pero se convirtió en una estrella de los pagos por evento con rivalidades como las de Conor McGregor y Jorge Masvidal. La inesperada última victoria ante Tony Ferguson fue la cereza en el pastel; en cuestión de horas pasó de una pelea en la que era desfavorecido en las apuestas 10-1 a una leyenda como ‘El Cucuy’, que inexplicablemente no enfrentó en su larga carrera dentro del octágono.
Nate salió a pelear, se divirtió, entretuvo a los fans y dejó claro que no necesita una vitrina llena de cinturones para estar en el Salón de la Fama. Es uno de los peleadores con la base de fans más fiel del MMA y los llevará con él al mundo del boxeo, como promotor de MMA o lo que se atraviese en el camino.
Khamzat Chiamev será campeón, sea en welter o mediano
El fiasco del peso arruinó una noche que podría haber sido la coronación de Khamzat al estrellato, pero su dominio dentro de la jaula no está en duda. Hizo ver mal a un rival competitivo como Kevin Holland y lo sometió en el primer round.
‘El Lobo’ es un problema para cualquiera y eventualmente se coronará. El camino ahora no está claro, aunque el ya venía coqueteando con la idea de enfrentar al ganador de Israel Adesanya y Alex Pereira tras UFC 281; esa es una posibilidad y si la promotora recupera la confianza en su corte de peso, donde había estado impecable en ambas categorías, es opción clara para Leon Edwards o Kamaru Usman en welter.
Irene Aldana, opción para Amanda Nunes
Fue otra finalización y el cuarto bono para la sinaloense en el UFC. Esta vez ante una rival que la superaba claramente en alcance y peso después de que Macy Chiasson pidiera un peso pactado en 140 libras para el combate.
El nocaut de patada ascendente al hígado es algo que no habíamos visto en su repertorio, ni el de nadie. Se ganó de nuevo la confianza de Dana White y está más cerca que nunca de una oportunidad titular, Julianna Peña, que suena para una trilogía con Amanda Nunes, podría ser su mayor obstáculo, pues ya venció a la número dos Ketlen Vieira con un sólido KO.
Mely Martínez de vuelta al pizarrón
Con sus credenciales en el kickboxing y como ex campeona de Combate Américas, Melissa Martínez llegó al UFC con una alta expectativa. El debut no fue como lo esperaba ante una rival como Elise Reed que se vio superior en talla tras el corte de peso y con una estrategia más agresiva.
Martínez tiene un enorme potencial y parece que los dos años y medio de ausencia en la jaula le cobraron factura. Es hora de encontrar los errores en la estrategia y probablemente ajustes en su entrenamiento, ya que en lo técnico parece contar con todos los argumentos.