El cáncer interrumpió su ascenso en MMA, pero el sueño de triunfar la mantuvo con fuerza durante el tratamiento y le presentó nuevos caminos de vida.
Nota del editor: El documental "María Llena Eres de Fuerza" sobre la inspiradora historia de la luchadora mexicana María José Favela se estrena el 11 de diciembre a las 9 p.m. ET en ESPN Deportes.
Las lesiones son comunes en las artes marciales mixtas, las cancelaciones suceden hasta en las carteleras de más alto perfil.
En marzo de 2023, María José Favela enfrentaba a Montserrat Rendon en la pelea que debería de darle a la ganadora un pase al directo al UFC, pero semanas antes del combate su cuerpo dejó de responder.
Para el momento en el que decidió cancelar el compromiso el entrenamiento se había vuelto inviable, múltiples diagnósticos apuntaban a las secuelas de un Covid prolongado, pero no se trataba de eso.
Después de años de vivir en Las Vegas, María José regresó a México para buscar atención médica, en específico con un primo, que le recomendó hacer análisis con urgencia.
En esos momentos, sus niveles de oxigenación eran tan bajos, que cualquier tipo de entrenamiento se volvería inviable. “Tenemos tres opciones, VIH, cáncer o tuberculosis”, fueron las palabras del especialista.
En un instante, el plan de vida se transformó.
La solidaridad de su entorno
En el MMA no existen los seguros médicos, si no eres parte de las grandes promotoras, tienes que lidiar con tus lesiones por tu cuenta.
Cuando María José anunció en sus redes sociales que su amiga Cynthia Calvillo abriría un GoFundMe para financiar su tratamiento, la comunidad de los peleadores se volcó detrás ella.
Dana White, Alexander Volkanovski, Ilima Lane-McFarlane, entonces campeona de Bellator, el ex monarca del peso medio del UFC, Sean Strickland y decenas de personajes aparecieron con sus aportaciones.
María José siempre fue respetada en el gimnasio por su arrojo y su voluntad para ayudar a otras peleadoras en sus campamentos.
El cariño se dejó notar cuando peleadores como Strickland, y Tatiana Suarez tomaron el micrófono tras sus victorias para decirle: “Sigue peleando, sigue luchando esta lucha” tras sus victorias en el escenario más grande, el UFC.
María José visitó la Basílica de la Virgen de Guadalupe por insistencia de si tía, un ícono en la fe católica de los mexicanos , “Le pedí que me salvara, que no me dejara morir, que tenía muchas cosas por hacer en esta vida”, pensó cuando rezó en el templo.
Fueron casi 10 meses antes de su regreso a gimnasio; en Xtreme Couture fue un momento de regocijo cuando volvió. Un equipo de élite, lleno de profesionales que estaba detrás de ella y le mostraron su respaldo en el momento más complicado.
No se trataba de tiempo en el gimnasio, ni preparación... El diagnóstico decía que había un 50 por ciento de posibilidades de supervivencia; entonces el sueño del octágono estaba muy lejos cuando María José fue diagnosticada con Linfoma de Hodgkin.
“Yo pude pelear contra el miedo más grande de mi vida. Encerrada en cuartos sin luz, sometida sobre graduación; han sido los momentos mas oscuros. Me agoté físicamente”.
Un campamento de MMA no debería ser un reto complejo, pero fue mucho más que eso.
El regreso
María José tenía prisa; quería una oportunidad frente a Dana White. Su amiga y compañera Joselyne Edwards la llevó a Paris, Francia, como su esquina.
Un acercamiento más a su sueño. Meses más tarde, Invicta FC le da una nueva oportunidad para cumplir su sueño.
La semana de la pelea es una pesadilla, sola. De su esquina Rodrigo Vargas sufre una enfermedad que le impide llegar a Kansas City. Las chicas que pelean en la cartelera la arropan, pero no es lo mismo:
“Llegué al punto de pensar en cancelar la pelea. ¿Qué más tiene que pasar para que te des cuenta que el MMA no es para tí, es algo que no quieres en una semana de pelea, mucho menos en mi regreso después del cáncer”. María José pelea. Mete las manos, pero su rival es mas fuerte.
La peleadora mexicana de MMA habla de las dificultades que ha enfrentado tras retomar su carrera, luego de superar el linfoma de Hodgkin; el nuevo documental de ESPN "María Llena Eres de Fuerza" cuenta su historia.
El camino no acaba
Tras un fuerte intercambio, María José va al suelo; en un instante, todo está en duda: “Algo me dijo, no te puedes despedir así. No regresaste del inframundo para esto; no quiero que me recuerden así”.
Maria José reflexiona, casi se quita los guantes en la jaula. “Pude salir con la mano arriba, no en el octágono sino en la vida”.
La derrota no fue sorpresa, María José tenía todo en contra; la victoria estaba en subir a la jaula.
La semana de pelea fue dura, y le recordó la naturaleza de este deporte. Esa caída pudo ser definitiva; fue un duro aprendizaje.
El giro inesperado
En medio de una depresión luego de la derrota, María recibió una oferta que no estaba en sus planes.
Power Slap se convirtió en una opción para practicantes de MMA. Especialmente en las categorías femeniles.
Una nueva disciplina, que le representó la paga más grande de su carrera y vivir de cerca un ambiente muy similar al de un evento de UFC. Desde el día, de medios, la logística y el momento de sentir la adrenalina del enfrentamiento.
María José venció por decisión a Marisol Ruelas en el que fue su debut, pero con una división que está formándose, podría colocarse como candidata al título con un par de apariciones más.
El cheque representó una grata recompensa, pero ese día salió campeona.
“Aprendí a vivir en el aquí y en el ahora. El haber podido salir de ese hoyo tan profundo, pude pelear con el miedo más grande de mi vida y salí con la mano levantada”.
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