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MotoGP: Pecco Bagnaia recuperó la sonrisa con su triunfo en Estados Unidos

El italiano venía muy golpeado por las derrotas constantes con Marc Márquez, pero el español se equivocó en Austin, se fue al piso y el turinés heredó una necesitada victoria. Álex Márquez fue segundo y lidera el Mundial.

“Batir a Marc aquí significaría muchísimo, porque es una de sus mejores pistas junto con Sachsenring, sabemos lo difícil que es, aunque estamos aquí para intentarlo”, dijo Pecco Bagnaia el jueves, antes del arranque de la actividad oficial del GP de las Américas, tercera fecha de MotoGP. El italiano llegó a Estados Unidos con el alma mancillada, el orgullo herido y su ánimo estrujado. Las dos primeras fechas de la temporada, Tailandia y la Argentina, fueron dos palizas enormes de Marc Márquez, el piloto que llegó a patearle el nido que tanto había trabajado para construir dentro el equipo oficial Ducati. El español ganó todo lo que había puesto en juego en Buriram y Termas de Río Hondo, mientras que el campeón 2022 y 2023 había quedado relegado a un segundo plano lejano, muy apagado ante los brillos de su resplandeciente compañero. Pero de golpe, justo en esa pista en la que el turinés pensaba que era muy difícil de batir a Marc, lo hizo y logró el triunfo en Texas.

Es cierto, la victoria fue heredada. Porque Márquez tenía el control absoluto de la carrera, mientras Pecco se las había arreglado para avanzar desde el cuarto cajón de partida para ser segundo, tras superar a Fabio Di Giannantonio y Álex Márquez. Pero hasta llegaban las ínfulas del italiano, no tenía nada para presentarle discusión a Marc. Pero Márquez falló. En la pista que tan bien le cae, pisó la pintura del piano en la cuarta curva y se fue al piso en la novena vuelta. Eso le entregó en bandeja la victoria a Pecco.

“Estoy súper feliz. La verdad es que grité muchísimo en la última vuelta, vengo de un período bastante difícil en el arranque del campeonato. Gracias a todos”, dijo Bagnaia antes de subir al podio, ataviado con su sombrero texano. Esa declaración es el claro mensaje de que esta victoria (la primera que logra en Austin en MotoGP) tiene un valor especial, no hay dudas. Fue su 30ª en MotoGP, ya sabe qué significa eso de vencer en la máxima categoría del Mundial. Pero necesitaba un triunfo que subiera su ánimo y elevara sus acciones dentro de Ducati. El enamoramiento de todos los integrantes del team oficial de la casa de Borgo Panigale era tan grande, que Bagnaia ya estaba en posición de segundo piloto.

Para Pecco, la felicidad por el éxito aumenta porque, además, fue en Austin, donde Marc tenía siete éxitos, un lugar que siempre fue su casa. Y llegó justo antes de la carrera de Qatar, donde el italiano ganó en 2024 y en la pista en la que Marc apenas venció una sola vez: 2014. La ilusión de Bagnaia de poder batallar mano a mano con su compañero, que hasta esa novena vuelta del GP de las Américas, parecía enterrada, surgió repentinamente.

Bagnaia no fue el único que se fue feliz de Estados Unidos. Álex Márquez también aprovechó el error de su hermano para finalizar segundo y es el nuevo líder del Mundial, con un punto de ventaja sobre Marc. El menor de los hermanos fue segundo en todas las carreras de las temporadas, sumando sprint y competencia principal. “Soy como el señor segundo, pero pudimos hacer el trabajo. Estoy feliz de liderar el campeonato”, contó el español del equipo Gresini.

Fabio Di Giannantonio completó el podio de Ducati con la Desmosedici del equipo de Valentino Rossi. En la fiesta de la marca italiana faltó Márquez, quien se fue sin nada de la carrera principal.