El líder de MotoGP llega al GP de Aragón con el objetivo de estirar su ventaja en la cima de la tabla y festejar a lo grande el aniversario de su primer gran mojón logrado en 125 cc.
El 6 de junio de 2010, un jovencito Marc Márquez, quien entonces tenía 17 años, lograba su primera victoria en el Mundial. El español estaba en su segunda temporada completa en la categoría menor, entonces denominada 125 cc. Aquel éxito en Mugello con la Derbi fue el inicio de una seguidilla de cinco triunfos en fila, que llegarían a diez en la temporada y tendría el título como corolario. Justamente 15 años después, el ocho veces campeón del mundo comenzará con la actividad de la octava fecha del ejercicio 2025 de MotoGP en el GP de Aragón, lugar al que llega como líder de la tabla con su Ducati.
“Esa primera victoria, en Mugelo, fue uno de los mejores momentos de mi carrera, porque era mi primera victoria en el Mundial. La recuerdo como si fuera ayer. La pretemporada había sido buenísima, rapidísima, pero con carreras justas, mala suerte, algunas caídas y también problemas con el hombro. Y luego llegó Mugelo y, tras esa primera victoria, cinco victorias seguidas”, rememoró el piloto oficial de Ducati, quien espera estirar su ventaja en la cima durante este fin de semana en Mororland, una pista que le cae muy bien. De hecho, es el piloto con más triunfos mundialistas en Aragon con siete (seis en MotoGP) y es el lugar en el ganó en 2024 y cortó con una sequía de casi tres años sin celebraciones en lo más alto del podio. Fue su primer triunfo con Ducati, después de haber dejado Honda. Fecha y lugar que invitan a soñar al español con lograr el cuarto festejo del año en carreras largas.
“Cuando llego a un circuito que me cuesta, digo, bueno, aquí me tengo que defender. Acá, obviamente, es una pista que me cae bien y trataré de luchar por la victoria. Pero ya quedó demostrado en Austin que no hay nada seguro”, dijo Márquez, en referencia a la caída que sufrió mientras lideraba en el GP de Estados Unidos, justamente en un trazado en el que siempre abrumó.
El hexacampeón de MotoGP llega a la octava fecha con 24 puntos de ventaja sobre su hermano Álex. Y en la semana previa a Aragón, el corredor de Ducati oficial aseguró que, en la casa, la madre, quiere que el menor sea campeón. En Motorland explicó: “Estuve en un evento y los periodistas me decían que mi madre apoyaba a mi hermano. Pero es broma, la familia vive un momento increíble. Estamos primero y segundo. Me fui a Cervera a comer con mi madre y seguí el chiste”, confesó. El que no acepta bromas de ningún tipo es Pecco Bagnaia, tercero en el Mundial, a 72 puntos y muy desanimado con el andar de su Desmosedici. Tanto, que algunos apuntan a su salida de la casa de Borgo Panigale al cierre del ejercicio actual.
