El campeón realizó un test con Aprilia en Misano, se sintió bien y tendría preparado el retorno al Mundial.
Jorge Martín llegó a lo más alto de su carrera deportivo el 17 de noviembre del año pasado, al consagrarse campeón de MotoGP. Desde entonces, el español apenas pudo correr un Gran Premio como monarca: el de Qatar, cuarta fecha de la temporada. Las lesiones que sufrió en dos accidentes durante la pretemporada (fractura de radio y escafoides de su mano izquierda) lo obligaron a perderse las tres primeras citas (Tailandia, Argentina y Estados Unidos). Finalmente, logró retornar en Losail para tener su estreno oficial con Aprilia, después de haberse consagrado con la Ducati del Pramac. Pero las malas continuaron: se fue al suelo en la carreara principal qatarí y terminó arrollado por Fabio Di Giannantonio. Resultado: 11 fracturas de costillas y neumotórax, con una semana de terapia intensiva. Desde entonces, no volvió a competir, pero el parón llegará a su final en el GP de Chequia del próximo 20.
Después de todo el proceso de recuperación, el español giró con una Aprilia de calle (RSV4) la semana pasada en Barcelona. Y este miércoles aumentó su test físico al realizar una prueba sobre una MotoGP en Misano. El madrileño completó 64 vueltas en la pista italiana y se mostró muy bien.
“Estoy contento de haber podido andar en una MotoGP. Haber recuperado pesa mucho más que cualquier cosa, después de más de 20 fracturas. El plan es para volver en Brno”, dijo Martín tras el día de pruebas.
Martinator no recibió el alta médica para disputar el GP de Alemania que se correrá este fin de semana en Sachsenring, pero todo indica que sí estará en la cita siguiente, GP de Chequia, que comenzará el próximo 18.
